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15 de marzo de 2024

Resumen biográfico del bejarano Francisco Hernández de Herrera, de soldado a encomendero en tierras chilenas (1ª Parte)

Autora: Carmen Cascón Matas

Publicado: Béjar en Madrid, 2021.

Dedicado al chileno Jorge Zúñiga Rodríguez

           Sueños de una vida mejor y regalada, de títulos de hidalguía ganados a golpe de espada y de cruz, sueños coloreados en oro y plata, sueños de ciudades bañadas por el sol, de selvas impenetrables con aires de paraíso, sueños de aventuras sin cuento, sueños de cascarones de madera mecidos por la brisa, sueños de sirenas y monstruos en un mar plagado de calma y de tormenta, sueños, en suma, demasiado atractivos como para ignorarlos en el caso de unos jóvenes de incierto futuro en la Castilla dominadora del mundo.

            Las figuras de los descubridores y conquistadores españoles en cierta forma nos son ajenas, pues bien es cierto que las biografías de Hernán Cortés o Francisco Pizarro han venido a engullir las de otros de menor renombre, pero no por ello menos relevantes. Y no digamos los oriundos de esta nuestra querida villa, arrasados sus nombres por el olvido debido a esa extraña enfermedad que padecemos de borrar la Historia sabe dios por qué. Si aquí nos son ajenas, en tierras americanas les son de sobra conocidas tanto en lo que se refiere a sus orígenes como a sus andanzas. Quizás les suene el nombre del bejarano Andrés Dorantes de Carranza[1], descubridor de California en la expedición de Alvar Núñez Cabeza de Vaca, por ostentar una de nuestras calles su nombre. No ha mucho se suma al elenco de bejaranos en tierras ignotas la de su pariente Pedro Dorantes Arias, conquistador del Río del Río de la Plata y Paraguay, y Juan Gómez Pasajero, cuyas biografías han sido trazadas en Béjar en Madrid por mi compañero de páginas Óscar Rivadeneyra Prieto[2]. En este artículo pretendo desempolvar, bien es verdad que de manera breve, la biografía de otro paisano: Francisco Hernández de Herrera. 

 El bejarano Francisco Hernández de Herrera según el artista Diego Bogado. Wikipedia

 

            Nacido en Béjar en 1550, su padre era Diego Hernández de Herrera*. De linaje hidalgo, como así lo atestiguan los apellidos paternos que pueden ser rastreados desde finales del siglo XV en nuestra villa, con 25 años decide lanzarse a la aventura americana embarcándose en un galeón en el puerto de Sanlúcar de Barrameda en pos de esos sueños recurrentes en paraísos perdidos, buscando la gloria y la fama. En la segunda mitad del siglo XVI también lo hicieron sus supuestos hermanos Martín, Antonio y Juan, en este caso a Nueva España[3]. Sin embargo, ese parentesco familiar puede ser puesto en duda, habida cuenta de que Herrera era un apellido común en la villa y además no se asentaron junto a su supuesto hermano, sino que partieron a hacer fortuna a otras tierras recién conquistadas.

3 de agosto de 2019

La placentina Inés Suárez: de manceba a santa


 Autor: Jorge Zúñiga Rodríguez

-Para que vayamos avanzando remito a tales lecturas-, decía el profesor en la primera clase, entregando un listado y dando inicio a actividades particulares por su parte, y por la nuestra a una supuesta estampida hacia la biblioteca (no había internet entonces). El profesor era muy apreciado por su tío el decano, porque movía a los alumnos. Esta introducción, con un siesnoés de despropósito no hay duda, es para decir que Pinceladas de Historia Bejarana ya publicó Mujeres extremeñas en el asentamiento español en Chile y Una mujer como lazo entre Plasencia y Santiago de Chile, que contextualizan la presente.



 Retrato póstumo de Rodrigo de Quiroga en su vejez, de autor anónimo, segundo esposo de Inés Suárez. Museo de Historia Nacional, Santiago de Chile.

      Lo nuevo de allá a acá es que Inés de Suárez (la misma) no llevaba el de (más o menos como lo de Montalbán en la Perinola de Quevedo), y que en algunos documentos aparece su apellido como Xuárez, debiéndose leer entonces Juárez. ¡Ah!..., y que están equivocados los historiadores que la dan por mucho más joven que su segundo esposo (pasando por alto a Valdivia, claro está), porque era en realidad cinco años mayor.

28 de agosto de 2017

Una mujer como lazo entre Plasencia y Santiago de Chile



Autor: Jorge Zúñiga Rodríguez

        Considerada entre los grandes personajes de la historia de Chile en el contexto de un panteón eminentemente masculino, la placentina Inés de Suárez llegó acá a los treinta y siete años de edad, con antecedentes personales que ya daban para una novela.

La actriz chilena Fernanda Urrejola en un proyecto fílmico de Chilevisión, 2016. Foros.fotech.cl

       En el reportaje Inés de Suárez refugiada en la ficción (La Tercera 05/09/2015) el periodista Pedro Bahamondes Chaud describe la participación de la única española en la conquista de los confines australes del planeta, y establece diferencias entre los relatos de la gesta. Sobre el traumático episodio de la primera defensa de Santiago, cita al historiador Benjamín Vicuña Mackenna en Historia crítica y social de la ciudad de Santiago, 1869: Fue ésta la primera mujer que formara su hogar en este suelo de dulces hogares, y aquello que han contado del degüello que hizo de siete caciques por su propia mano, no es sino uno de esos plagios de escritores pedantes que quisieron pintarla como Judith, esta caricatura demonizada de la mujer.

21 de agosto de 2017

Mujeres extremeñas en el asentamiento español en Chile



Autor: Jorge Zúñiga Rodríguez


Inés de Suárez nació en Plasencia en 1507. Su madre, mujer laboriosa y sencilla, le enseñó el oficio de costurera y la figura de su padre, de quien nada se sabe, fue reemplazada por la de su abuelo, carpintero ebanista. Era Inés poco sociable y sólo se entendía con su hermana Asunción. Inducida por su abuelo casó con Juan de Málaga, de quien no tuvo hijos y que pronto marchó a América. Pasaron los años sin noticias de su marido e Inés, que tenía temperamento, consiguió una licencia del rey y fue a buscarlo. Al enterarse que este había muerto, se las ingenió para obtener una pensión de viudez, y por añadidura recibió también una encomienda de tierras y de indios en Cuzco, Perú.         




Inés de Suárez representada en una teleserie. Enterartenoticias.blogspot.com



Tocó la casualidad que la encomienda de Inés lindaba con la del también extremeño Pedro de Valdivia, que se aprestaba a partir a Chile. A pesar de que Pedro era casado en España, ambos se atrajeron e Inés decidió acompañarlo. El permiso para viajar le fue extendido a Inés como sirviente doméstica de Valdivia para evitar problemas con la Iglesia. En el nuevo destino, donde Inés es considerada una de las fundadoras de la capital, desempeñó un papel muy importante, siendo descrita por el historiador moderno Tomás Thayer Ojeda como una mujer de extraordinario arrojo y lealtad, discreta, sensata y bondadosa, que disfrutaba de una gran estima entre los conquistadores