Autor: Roberto Domínguez Blanca
Fotografías: Sol Cañibano Peláez
Publicado: Revista de Ferias y Fiestas de Béjar, 2014, pp. 18-20.
Otros automóviles bejaranos
Relacionados
con nuestra ciudad y su comarca son varios los vehículos expuestos en el MHAS, como
un Plymouth Q de 1928, un De Soto Six de 1932 (empleado como taxi en la Sierra de Béjar desde 1945)
o un Biscuter “Rubia” de los años 50;
pero vamos a detenernos en otro, en el que sería el segundo vehículo bejarano
más antiguo del que tenemos noticia: el Amilcar
CS de 1925, matrícula M-23076. Es éste un cyclecar, un coche deportivo francés
que se comenzó a fabricar en 1920. En su ficha técnica se especifica que alcanzaba
una velocidad máxima de 95
km/h . con una
cilindrada de 985 cc. y 23 cv. Pesa 450 kg y el consumo a los 100 km es de 7 litros . Con la
fabricación de estos coches de competición Amilcar llegó a codearse con los
míticos Bugatti, obteniendo 102 victorias en carreras de todo tipo, solamente en 1924.
Amilcar CS del Museo de Salamanca
El origen
bejarano de esta unidad se especifica en la cartela del museo, en la que se
puede leer que había sido hallada en un gallinero de Béjar y, que pese a todo,
se pudo adquirir completamente original. Este Amilcar realmente vino a Béjar a
pasar sus últimos años de “vida”, puesto que con cerca de 20 años a sus
espaldas, en 1940 Manuel Francés Villarán le da de alta. Sólo tres años después
es traspasado a Pablo Santos Martín-Hernández, quien en 1947 lo da de baja,
hasta que décadas más tarde sea recuperado por Gómez Planche. El Amilcar [1] conserva
la placa del agente de la marca en España donde el vehículo fue adquirido, Juan
Mauvais, cuyo concesionario se encontraba en el número 3 de la calle Serrano de
Madrid. No obstante, el primer Amilcar que hubo en Béjar fue otro, el que dio
de alta en Béjar en 1929 José Galiano Muñoz
con matrícula M-16826.
El coche del
MHAS, de vivo color rojo, cuenta con tres plazas algo justas (dos delante y una
atrás) y con el volante en el lado derecho tras un parabrisas partido. En el
frontal destacan las ruedas bien separadas del chasis con el paso de rueda
elevado, los dos faros eléctricos así como la vertical calandra engalanada con
el nombre de la marca, y dos emblemas: uno en la misma calandra en forma de
lagartija y otro rematando el tapón de la
gasolina en forma de águila, y no de caballo
alado que es el propio de la marca a partir de 1927 [2].
Bajo la calandra se halla la manivela de arranque habitual de los coches de
esta época. Pero lo más llamativo es la forma emproada de la zaga, respondiendo
a un tipo de carrocería denominado Torpedo Punta Carrera.
Los primeros pasos de la automoción en
Béjar
¿Qué panorama
presentaba la motorización de vehículos en el Béjar de hace casi un siglo?
Podemos remontarnos hasta 1924 gracias a la documentación para el impuesto de carruajes de lujo existente en el
archivo municipal [3]. Desde este año hasta 1927
los padrones anuales no aportan la marca de los vehículos, mezclando en una
misma y única categoría automóviles y motocicletas con todo tipo de carruajes
tirados por animales (cestas tiburys, milords, familiares…). En total, toda
esta variedad de vehículos sumaba 45 unidades para una población de 9.224
habitantes, especificándose las altas y bajas. En 1926 el parque móvil ascendía
a 56 unidades y al año siguiente se rebajaba a 53.
Packard 1932 Ninth Series De Luxe Eight 904
Fuente: wikipedia
El
progresivo crecimiento del número de vehículos a motor en Béjar propició que el
inventario de 1928 fuese más detallado, desapareciendo la denominación de carruaje y distinguiendo cuatro
categorías de las que se excluían los transportes de tracción animal: A para
turismos particulares; B para autobuses, ómnibus y vehículos de alquiler; C
para camiones destinados al transporte de mercancías en general; y D para
motocicletas. En dicho año, 46 pertenecían a la clase A, 20 a la B , 13 a la C y tan sólo 4 a la
D. De todos se identifica la marca pero no
el modelo, y en el caso de las motocicletas, de las cuatro anotadas nada más se
dice que una de ellas es una ABC. De los turismos se aporta la potencia y la matrícula,
así como el nombre del dueño y su domicilio. De los 46 turismos de ese año
abundaban los coches populares, pues la marca más representada era la italiana
Fiat con 14 unidades. Le seguía la americana Ford con 9, y a distancia la
francesas Citroën y Donnet-Zedel y la norteamericana Studebaker con 2. Con uno las
francesas Delage, La Buire ,
Talbot, Ballot, Panhard, Peugeot y Donnet; las norteamericanas Packard,
Lincoln, Chevrolet, Overland, Rochet-Schneider, Hupmobile, Gray y Buick; la
británica Morris y la española Hispano-Suiza. Llama la atención el casi predominio
de compañías francesas y norteamericanas. La gran mayoría de los coches estaban
matriculados en Salamanca y algunos pocos en Madrid. El principal poseedor de turismos
era la firma Sucesor de García y Cascón, que disponía de cuatro Fiat. José
Galindo Zúñiga, quien llegaría a ser alcalde de Béjar en 1937, era dueño nada
menos que del citado Hispano-Suiza, la marca española de mayor prestigio y exclusividad
y que no tenía que envidiar nada a los Rolls Royce, Bugatti o Auburn. El
Hupmobile de José Méndez Fernández, el Fiat de José Sacristán Vidaurreta y el Donnet
de Saturnino Faure Gómez fueron usados para servicio médico.
Hispano-Suiza T49 sport de 1927
Foto extraída de aquí
Entre
los de la clase B destacamos un España de 1921, la otra marca que podemos citar
en el raquítico panorama de la industria patria del automóvil, con matrícula
B-7288 y que pertenecía a Damián Hernández Domínguez. Dentro de esa clase B, dos
Ford transportaban correo y viajeros: el de Pablo Bernal Rodríguez y el de
Mariano Coca Coca con sede en el Regajo. Otro Ford más se dedicaba exclusivamente
al transporte de viajeros y era propiedad de Hijos de Román Martín.
Agradecimientos
Justo
es, antes de finalizar, reconocer las facilidades que en todo momento nos ha brindado
el MHAS para este artículo; gracias tanto a Luis Miguel Mata por sus gestiones
como a Pilar y a Lucía por el exquisito trato que nos han dispensado. Nuestro
agradecimiento especial a Ricardo Sanz Escobar por su amabilidad y el tiempo
que nos ha dedicado. También, agradecer de nuevo la ayuda prestada por Pilar
Noguera Sánchez, encargada del Archivo Municipal de Béjar, cada vez que
emprendemos una investigación como la presente.
[1] Datos
obtenidos sobre este mismo coche en la revista Motor Clásico nº 16, pp. 6 y ss.
[2]
Revista Automóvil, mayo de 1985.
[3] Archivo Municipal de Béjar. Sign 1439.
El primer recuerdo que tengo de un coche es de un Delage de mi padre (cuadrado) que "hacía el avión" en mi primer viaje a Madrid.
ResponderEliminarHacer el avión era el ruido que hacía el motor cuando pasaba de 70 km/h en las cuestas abajo. Era tremendo. Sé que antes había tenido un Chevrolet, pero de ese no me acuerdo. Esto era ya en el año 1950 y ya había algunos "aigas" en Béjar.
Me gustan los coches antiguos tanto como detesto los modernos. Y el Hispano-Suiza que nos muestra es un verdadero primor.
ResponderEliminarBuenas noches
Bisous
Interesantes artículos. Creo recordar haber oído o leído que, en algún momento, Béjar fue la ciudad española con mayor número de coches; en cifras relativas claro.
ResponderEliminarUn abrazo,
Hispano-Suiza T49 sport, una chulada, me gustan para verlos pero no los ambiciono.
ResponderEliminarSaludos y como siempre bien documentado.
Tener un automóvil de esa fecha, tiene que ser una gozada.
ResponderEliminarLo que no tenga Bejar..........
manolo
En cuanto tu Comentario en mi blog, totalmente de acuerdo.
El dinero es D. Dinero.
Una auténtica joya de la automoción. Esos coches eran algo más que un simple instrumento de transporte, sino que representaban aquello que se suele llamas "status symbol", como las calesas y conches de caballos de siglos pasados.
ResponderEliminarUn beso
ResponderEliminar(continuando...)
Me encanta ese deportivo rojo, más por su estética que por sus prestaciones, aunque el Hispano Suiza tampoco me importaría.
Y por supuesto, todo muy bien documentado.
· un abrazo
· LMA · & · CR ·
He tenido que empezar por la primera parte porque no se como se me pasó esta publicación.
ResponderEliminarNo soy conductora pero eso no impide que disfrute de esos bellísimos diseños, que tuvieron los atomóviles del pasado.
El Hispano-Suiza tiene una fotografía en un entorno envidiable.
Besos
Si tuviera que quedarme con alguno ( los sueños todavía no pagan impuestos) el elegido sería el Hispano-Suiza, es una preciosidad.
ResponderEliminarSaludos
Me gustan todos, el Hispano es una joya. saludos
ResponderEliminarMe encanta todo lo antiguo que no viejo y los coches no van a ser una excepción. Unos modelos preciosos y bien conservados. Me encantaría pasearme en uno de ellos. Claro que herían falta las carreteras antiguas sin este horror de coches que padecemos día a día.
ResponderEliminarBellas entradas ambas dos. Bss
Hola Carmen:
ResponderEliminarEl Packard está estupendo, pero como comentan antes, el Hispano Suizo está impresionante.
Besos
Si el Ford Speedster era impresionante, este Amilcar es un auténtico deportivo. Una maravilla de los años veinte. Con razón competía con los Bugatti.
ResponderEliminarHa sido estupendo conocer las marcas que rodaban por Béjar hace 86 años. Todo un espectáculo debía de ser ver al Hispano-Suiza T-49 en especial o cualquiera de los otros vehículos por las calles (imagino que aún sin asfaltar) llenas de peatones y bicicletas.
Mis felicitaciones a Roberto Domínguez por los textos.
Abrazos, Carmen!!
No conocía la marca Amilcar y su historia llena de éxitos en competiciones de carreras haciendo la competencia a todo un Bugatti.
ResponderEliminarGran añoranza de no tener una marca propia, de País, como Hispano-Suiza.
Como siempre un maravilloso documento.
¡¡¡Felices Fiestas y un Próspero Año Nuevo, 2015, en compañía de Todos tus Seres queridos!!!
Abrazos y Besines.
Amilcar? Como el cartaginés? Eso es todo una declaración de principios :) Qué bonitos son!!! Veo que el hispano-suiza gana de largo. También es mi favorito :)
ResponderEliminarUn abrazo, Carmen
Menudas joyas Carmen da gusto verlos. El marco que le han puesto al Hispano Suiza es una maravilla.
ResponderEliminarTengo que ir al museo.
Un beso.
La Historia es un banquete. Te da acceso a todo tipo de manjares, como este desfile de vehículos a cual más atractivo que debieron hacer las delicias de sus dueños y de los vecinos, sobre todo los pequeños bejaranos, a los que imagino mirándolos con los ojos muy abiertos..
ResponderEliminarSaludos
Cuando la cantidad de vehículos del inicio mundial de la motorización particular se muestra con todo su esplendor, dudas de con cual te identificas como modelo que habrías comprado en esa época. La belleza y el diseño de coches se amoldó a unas necesidades muy especiales conforme la tecnología avanzaba y se solicitaba velocidad, seguridad, discreción o cualquier otra característica. Cuando visito exposiciones o subastas de coches antiguos creo que cada cual ya tiene prefijada una idea del coche que desea y el motivo por el que lo quiere. Desde nuestro presente de confort, seguridad y prestaciones, en general, a muchas personas nos apasiona cómo pudieron obtener las prestaciones que se describen con estos modelos tan livianos como pesados y complejos de manejar.
ResponderEliminarUn cariñoso abrazo, querida Carmen.
Hoy en día son joyas para coleccionistas: porque aparte de su esmerado trabajo siempre han sido propiedad de gente de posición o de algún caprichoso.En Tenerife se celebran dos pasacalles de coches antiguos y me choca que no tengan un museo donde los puedan exponer todo el año: porque son una maravilla y más de la época que datan.
ResponderEliminar-Carmen, es la tercera vez que dejo un comentario y no me lo publica y sino me sale en anónimo algo me esta pasando con el navegador.?
Un beso feliz fin de semana.
Pues es raro porque a raíz de tu comentario he mirado en la bandeja de comentarios "spam" y no he encontrado nada. Es posible que el navegador o el pícaro blogger estén haciendo de las suyas.
EliminarLa verdad es que sería bonito que estos ejemplares salieran de paseo por las calles al menos una vez al año.
Gracias por tus comentarios.
Un beso
...a la tercera va la vencida menos mal;)
ResponderEliminarEllos son el fiel reflejo del paso de los años, de como todo ha evolucionado al mismo tiempo que nosotros lo vamos haciendo,.
ResponderEliminarNo queda más remedio; esos coches, antes de última moda, se han tenido que adaptar a nuestras exigencias actuales, ahora lo que se lleva es correr. Al paso que vamos, un día nos estrellaremos todos.
Te prometo que si haces el confit de pato, vas a triunfar, es muy fácil y no lleva mucho tiempo. ¡Suerte!
Abrazos.
kasioles
El más modesto de todos el Biscuter, supongo que el modelo Rubia, que no sé cual es, no aportaría muchas diferencias con otros de la misma clase. Alguno vi al natural de pequeño, Eran tan simples que carecían de marcha atrás. y si no era posible dar la vuelta aprovechando su radio de giro, había que levantarlo por la popa y darle la vuelta. Un aunténtico made in Spain.
ResponderEliminarUn abrazo.
"La Navidad forma parte de esa niñez que conservamos en nuestro corazón, y que renovamos cada año aunque sea en secreto” Katy
ResponderEliminarFelices fiestas junto a los tuyos. Un cálido abrazo navideño
¡FELICES FIESTAS CARMEN Y QUE ESTE NUEVO AÑO 2015 VENGA CARGADO DE BUENOS PROPÓSITOS!
ResponderEliminarUn abrazo.