Autoras: Luisa y Vega Gómez González
Publicado: Béjar en Madrid, nº 4.611. 30 de julio de 2010.
Son 46 los kilómetros que distan de Béjar a la villa abulense de Piedrahíta. Saliendo por la N-630, atravesaremos o pasaremos cerca de localidades como El Puente Congosto, Santibáñez de Béjar, El Tejado o Villar de Corneja, que también pueden ser objeto de ésta u otra visita. Todo dependerá del tiempo que deseemos invertir.
Otro camino puede ser el de Becedas y Barco de Ávila, también de gran interés.
Pero centrémonos en Piedrahíta, que fue declarada Conjunto Histórico por el Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León en enero de 2008. A la entrada encontraremos el Hospital de Superunda, de principios del siglo XX, pero hoy en desuso y esperando fondos para una reforma del edificio que permita su aprovechamiento.
Accederemos al pueblo a través de lo que antaño fue la puerta de El Mirón, hoy desaparecida, al igual que la mayor parte de la muralla que envolvía el entramado urbano de origen medieval. Sólo queda de ella un trozo de los lienzos Norte (muro del Convento de MM. Carmelitas) y Oeste, parte de los torreones de las puertas de Ávila y El Barco (a los extremos de las calles del mismo nombre), así como el postigo de la fortaleza (hoy iglesia).
Postigo de la antigua fortaleza en el lienzo oeste de la muralla
Dejando los extramuros nos adentraremos en el plano radial de la localidad por la calle Alcacerías, donde aún existen soportales de techo bajo sobre pilares de madera y casas protegidas por teja en la pared del hostigo como en la Sierra de Béjar. Lástima del mal estado de algún tramo de la columnata porticada y de la pérdida de la sección final hace unos años al realizar un edificio moderno.