Autor: Jorge Zúñiga Rodríguez
Correspondió al
catalán don Manuel
D´Amat i Junyent, trigésimo primer virrey del Perú, inaugurar en Rímac (Lima) en 1766 la plaza firme de toros de Acho, la
más importante y antigua de América, antes que el rey Carlos III terminara
de autorizarla.
Foto antes de la
remodelación de 1944, con el templador
o burladero. Plazadeacho.galeon.com
Lo de plaza firme era por estar cerrada e instalada
en lugar fijo, en contraposición a lugares más o menos abiertos y móviles donde
se corrían toros, circunstancia aquella
que permitía controlar las incursiones espontáneas de indios y negros en la arena. La forma original del coso era
octogonal, y tenía al medio un burladero cuya asta, casualidad o no, estaba
enclavada en el punto mismo del primitivo quemadero de la Inquisición.