Autora: Carmen Cascón Matas
Me sorprendía ayer Antonio Sánchez Sánchez, coleccionista y compañero del Centro de Estudios Bejaranos, con la fotografía de una talla, para mí desconocida, que se veneraba en la iglesia parroquial de San Juan Bautista de Béjar. Y lo digo en pasado porque de esta talla no queda a día de hoy rastro alguno. Además, en la albúmina, de autor desconocido por cierto, no aparecía la advocación de la imagen, una cuestión imprescindible para intentar encontrar información acerca de ella.
Recurriendo a David Hernández y al párroco de la mencionada iglesia, don Roberto Hernández, conseguimos saber que se trataba de San Luis Gonzaga. Y a partir de ahí "solo" tenemos que reconstruir la posible historia social y religiosa vinculada a ella. Este jesuita italiano que vivió en la segunda mitad del siglo XVI (1568-1591) era hijo del marqués de Castiglione y de Marta Tana de Santena, una joven dama de la reina española Isabel de Valois, tercera mujer de Felipe II. Pero lo que más nos interesa de su vida es que la vivió con intensa piedad, tanto que fue ordenado jesuita, y que murió muy joven, con 23 años, a causa de la peste en Roma. Su iconografía coincide plenamente con la albúmina que nos muestra Antonio Sánchez: vestido de sacerdote con roquete, rasgos jóvenes, un crucifijo en la mano y rodeado de lirios, que significan la inocencia.