Autor: Domingo Garrido Sánchez
Publicado: Béjar en Madrid, 20 de noviembre de 2015
A las ocho horas
del día 25 de noviembre de 1949 fallece en Meudon (Francia) el escultor
bejarano Mateo Hernández. Sin embargo, la noticia no se difundió hasta el día
26 por la agencia de noticias United Press International. Ese mismo día el
Embajador de España en París cursa un telegrama cifrado al Ministro de Asuntos
Exteriores notificándole su muerte y también que había aparecido un testamento
ológrafo, con fecha 12 febrero de 1949, “en el que instituye heredero de sus
obras en toda clase de piedras al Estado Español y la finca donde vive. Pero
que la casa y jardín podrá disponer mientras en absoluto durante su vida la
Señorita Fernande Carton”, pareja del artista.
Mateo Hernández Sánchez
El 29 de
noviembre, tras ser embalsamado, el cadáver de Mateo fue depositado en una caja
de cinc que, debidamente precintada con los sellos del Consulado, fue
introducida en un arcón de roble con empuñaduras de plata y llevado a un nicho
del cementerio de Meudon, hasta que fuese trasladado a Béjar.
Mateo esculpiendo su Bañista, hoy expuesta en el Reina Sofía de Madrid