Autora: Mª Carmen Cascón Matas
Publicado:
Especial de Béjar en Madrid,
diciembre de 2009
Las cuantiosas
rentas de un noble eclesiástico. Luces y sombras.
El clérigo Antonio de Bolaños nunca
careció de sostenimiento económico a lo largo de su vida, según deducimos de su testamento, proviniendo éste del curato de
dos capellanías (capitán Juan de Bolaños y Cristóbal de Carriño y Bolaños) y una tesorería (el hospital de San Gil), provenientes todas ellas de los enlaces familiares y de una estrategia de linaje basada en el poder y la acumulación de riquezas.
Fragmento de "El cambista" de Quintin Matsys
Vayamos analizando cada una de ellas. A la muerte del su pariente el doctor Nicolás de Bolaños fue designado capellán de la capellanía del capitán Juan de Bolaños de la iglesia de El Salvador por su poseedora, su sobrina-nieta María de
Rojas y Bolaños (todo quedaba en casa, como vemos). La dama era hija de Antonio de Rojas y Bolaños y de Isabel
López de Bolaños, y había matrimoniado ventajosamente con Alonso Nieto Gallego en 1627. Hijo de Pedro Ramírez Osorio y de Ana Nieto Camargo y Dorantes, fue designado regidor por el estamento de los hijosdalgo justo un año antes de su boda. Precisamente en 1626 presentó una solicitud para ser patrón
de la memoria de doña Juana de Carvajal, fundadora de un hospital para enfermos radicada en la iglesia de san Gil. Esta institución de
beneficencia se costeaba por medio de cuantiosas rentas en manos de un patrón y
un administrador. Don Alonso nombró al tío de su mujer Antonio de Bolaños administrador de los bienes del santo hospital.
Hasta un año antes de que el cargo recayese en don Alonso, el patrón había sido su tío, Alonso Nieto Dorantes, vecino de Madrid, que lo cedió a su sobrino por una plausible razón:
se trasladó a Indias como tantos otros españoles de la época, seguro de
hacer fortuna. Quién sabe si allí no estarían esperándole los miembros de la
familia Dorantes, los sucesores del aventurero y soñador Andrés Dorantes[1] expedicionario junto a Cabeza de Vaca por territorios de California,
con los brazos abiertos. El propio Alonso Nieto explica ante el consistorio que su tío “ha pasado de
estos reynos a los de las Indias de Nueva España, con su mujer, casa y
familia·”. Asimismo presenta una carta del viajero diciendo que “yo di poder a don Alonso Nieto, mi sobrino, vezino de la Villa de Bexar para que por
mi y en mi nombre tomase la posesion del patronazgo del hospital, memoria y
capellania que son de Juana de Carvajal, de buena memoria”[2].
Cabeza de Vaca
Por
otra parte, Cristóbal de Carrizo y Bolaños había dictado en su testamento de 1565 la fundación de otra
capellanía en la iglesia de El Salvador consistente en la celebración de dos
misas semanales en su altar mayor, designando como primer patrón a
Pedro de Bolaños y estipulando que este cargo recaería siempre en el titular del
mayorazgo de este apellido “o quien posea
sus Casas Principales y su vinculo” y que su capellán debía ser “clerigo y
presbitero y que sea de linaje y apellido de los Bolaños[3].
El segundo capellán de la misma fue, cómo no,
Antonio de Bolaños. Si tenemos en cuenta que la capellanía se encontraba cuantiosamente dotada con una renta anual de 10.000 maravedíes, extraída en su mayor
parte de tierras situadas en Fuentes de Béjar, nos explicaremos entonces
sobradamente las riquezas de nuestro Antonio.
Volvamos
a una de las preguntas que nos hacíamos al principio del artículo. A la muerte
de Pedro de Bolaños hacíamos mención de una serie de irregularidades a la hora
de cumplir con el testamento por parte de sus herederos, pues la iglesia de El
Salvador presentó un pleito por incumplimiento de pago de un sagrario y una
custodia. Si a ello sumamos otros encontrados en distinta documentación y la
situación de ruina de la casa de Barrio Neila, considerada el núcleo del mayorazgo
de los Bolaños, podríamos afirmar que estaríamos ante una familia noble pero
depauperada, situación más común de lo que parece entre la aristocracia de la
época. Solución: medrar en la escala social a través de la posesión de cargos,
dignidades y matrimonios. El caso de los Bolaños es muy claro. Pedro de Bolaños
se vio favorecido por la posesión del patronato de varias capellanías y el
sueldo proveniente de su cargo de Notario Eclesiástico. Con estos réditos fue
capaz de pagar las carreras de su hijo primogénito, Pedro, y de Antonio,
destinado un día a regentar las funciones de capellán. Sin embargo, le quedaba
en el tintero su tercer hijo, García. Lo más factible y sencillo fue ligarle mediante el
matrimonio con una muchacha de buena familia y rentas jugosas, Úrsula, siguiendo una
estrategia familiar común al estamento nobiliario. Sin embargo, poco después de la muerte de Pedro de Bolaños estalló un nuevo escándalo al
presentarse varios pleitos a causa de la mala gestión de los dineros venidos del
mayorazgo de su nuera Úrsula, parte de cuyos pagos tuvieron que ser asumidos
por Antonio de Bolaños (una cantidad de 50.000 maravedíes).
"Finis Gloriae Mundi" de Juan de Valdés Leal
A ello debemos añadir
que una sobrina del capitán Bolaños, María, casó con un platero ciertamente corrupto. Antonio de Rojas, de familia de
orives (su padre Francisco de Rojas también ejercía este trabajo manual), había
conseguido casarse con una dama de la nobleza bejarana, María de Bolaños,
nombrada por su tío el rico capitán Juan de Bolaños como heredera de su
patronato con polémica, pues existía una objección problemática: el cargo no podía ser
ejercido por personas que realizasen oficios mecánicos, condición
que se hacía extensiva a los maridos en el caso de que el patronato recayese en
una mujer de la familia, como así ocurrió. La platería se consideraba un oficio
mecánico, realizado con las manos, indigno del estamento nobiliario, así que María de
Bolaños habría quedado exenta del patronato. Sin embargo, Antonio de Rojas dejó su oficio a partir de 1585, es decir, a partir de la muerte del capitán, lo cual
significaba la obtención inmediata del cargo, pues el impedimento desaparecía. Nos parece sugerente admitir que pudo
dejar tal actividad por causa de las clásulas de la herencia marital[4].
Cruz procesional de Candelario, de Jerónimo Vázquez
Por otro lado, se han constatado
en la documentación varios fraudes cometidos por Antonio de Rojas. El más sonado data de 1577, cuando el ayuntamiento de Candelario
comienza a reintegrarle las costas del encargo de la cruz procesional de la iglesia. Cinco
años más tarde Antonio de Rojas subcontrata la obra a otro platero,
Jerónimo Vázquez, mientras él continúa cobrando los pagos en concepto de autor
de la pieza. La maniobra ya la había ensayado con anterioridad. En 1572 aceptó el encargo de un cáliz por parte de la iglesia de El Salvador de Béjar que en 1578 aún no
había entregado. En 1583, la misma parroquia le reclama 25.000 maravedís que no fueron devueltos tras ejercer el cargo de
mayordomo de esta iglesia[5].
La jugada es oscura: los Rojas medraron de manera inusitada dentro de la sociedad bejarana
en cuanto cruzaron su camino con los Bolaños. Unos aportaban nobleza, limpieza
de sangre, privilegios; otros recursos económicos. El enlace compensó la
balanza de uno y otro lado, aportando éstos lo que faltaba a aquéllos y
viceversa.
Continuará
[1] Sobre
los Dorantes SANTONJA GÓMEZ, G: La
epopeya americana de Andrés Dorantes. Discurso nº 3 de ingreso en el CEB.
CEB y Caja Salamanca y Soria. Béjar, 1992.
[2]Archivo
parroquial de El Salvador. Libro de
cuentas del Hospital de San Gil (1623-
1742).
[3] Archivo parroquial de la iglesia de El
Salvador. Documentación suelta.
[4] Estas
conclusiones se las debo a Roberto Domínguez Blanca, especialista en platería
de la comarca
e historiador del Arte.
[5]
DOMÍNGUEZ BLANCA, R.: La platería del
Renacimiento en Béjar. Ed. Centros de Estudios Bejaranos. Béjar, 2009. pp.
46-49.
Poderoso caballero es don dinero, no hay más que ver como todos bailaban, bailan y bailaran a su son. Un abrazo,
ResponderEliminarIntrigas familiares bejaranas, donde el poder económico y religioso, al igual que el nobiliario, se convierten en hereditarios.
ResponderEliminarTu trabajo de investigación es digno de admirar, Carmen. Contagias ese entusiasmo.
Un fuerte abrazo.
Interesante documento, de una u otra manera todos acabaremos formando parte de Bejar. un saludo
ResponderEliminarMadre mía, esto de la corrupción es un mal endémico presente en todas las épocas. Mire usted el tal Rojas. Todo vale con tal de trepar, al parecer.
ResponderEliminarFeliz fin de semana, madame
Bisous
Realmente la política matrimonial no era sólo cosas de reyes y la corrupción parece ser que ha existido siempre. Un trabajo muy interesante el que realizas.
ResponderEliminarSaludos Carmen
Antonio de Rojas tuvo que ser un elemento de cuidado, mientras que su padre Francisco no tuvo nuinca ningún problema serio que sepamos.
ResponderEliminarAntonio de Rojas debe ser el modelo a imitar del parlamento actual....
ResponderEliminarUn beso, Carmen
Interesantisimo el devenir de estas prominentes familias, Carmen, es un trabajo excelente el que haces, muy claramente documentado.
ResponderEliminarUn beso, feliz domingo.
Tras una semana ajetreada entro ahora para ponerme al día de tus últimas publicaciones.
ResponderEliminarTus trabajos son extraordinarios.
Besos
http://ventanadefoto.blogspot.com.es/
Bueno... al final borrón y cuenta nueva si el tal Rojas compenso la balanza de un lado y otro lado: es que de verdad corruptos, hasta en las mejores familias(...)vamos a dejarlo ahí.El dinero cuanto mal hace y en manos de estos ambiciosos aun peor.
ResponderEliminarUn trabajo excelente Carmen : muchas gracias por compartir estos momentitos.
Un abrazo.feliz domingo.
Me ha recordado la lectura alguna obra de Moliére, creo que El burgu´ñes gentilhombre, donde la falta de clase o de abolengo nobiliario se compensaba con grandes cantidades de dinero. Así se compraba lo que no se tenía.
ResponderEliminarUn saludo.
Lógicamente quise decir "El burgués gentilhombre", no esa cosa rara que he puesto sin querer. Mil perdones.
EliminarEn todas partes cuecen habas. En unas más que en otras. La codicia y la avaricia no tienen límite ni fecha de caducidad por desgracia. Luego todo se sabe pero que les quiten lo bailado.
ResponderEliminarBss y buena semana
Cuesta entender que todas estas tramas se puedan tejer con los Evangelios en las manos: la codicia traspasa los muros de los templos. A fin de cuentas, todos somos personas con sus virtudes y defectos.
ResponderEliminarUn beso.
Hola Carmen:
ResponderEliminarEl fragmento de hoy me recordó mucho las intrigas cortesanas...Y algunas de esas de la televisión de los '80 nestilo Falcon Crest... ;D
Besos
Que seis años después del encargo aún no hubiera entregado el cáliz da que pensar que tenía negocios más lucrativos de los que ocuparse.
ResponderEliminarUn abrazo.
Buenos días Carmen, una entrada desvelando las trifulcas de esos tiempos, que como vemos seguimos igual,el poder, el dinero y las apariencias siguen presentes en hoy.
ResponderEliminarGracias
Un abrazo
Sor.Cecilia
Todo se hereda y queda en casa... El poder y el dinero siempre lo disfrutan mucho más algunos.Sigue pasando Carmen.
ResponderEliminarUn beso.
Al leerte me has recordando que no hace mucho escuché a un historiador que animaba con humor a matrimoniar basándose en la situación social o económica, asegurando que ese tipo de uniones raramente fracasan, ya que al ser una transacción comercial no hay sentimientos que puedan romperse.
ResponderEliminarAl contrario de las uniones basadas en el amor y la pasión, donde lo emocional manda sobre la razón llevando a rupturas de las que después muchas parejas se arrepienten.
Saludos
Quien tiene poder tiende a abusar de él... dice una frase.
ResponderEliminarExcelente aporte a la cultura querida amiga. Un beso grande.
Pd Con respecto a sentirse mejor cada uno sabe lo que le hace bien, a mi en particular salir y estar con mucha gente me hace sentir más sola, será que no tengo nada que ver con esas gentes, que no tenemos en comun nada.
Hola Carmen: hoy casualmente salio" Hilaturas Béjar" en el telediario y comentaban que es la única que trabaja esta fibra natural.
ResponderEliminarBesos.
Me lo han comentado, pero no lo he visto. A ver si lo encuentro buscando en el portal de RTVE.
EliminarUn beso
Ya te he resaltado en varias ocasiones, Carmen, la meticulosidad de tus investigaciones. Es tan importante una serena y recta investigación para desentrañar estas intrigas familiares, muy bien pensadas en su entramados para todos, malvadas y desastrosas para los fondos de instituciones, el arte y su autoría, que el beneficiode unos pocos se convertía en pura miseria para quienes con impuestos u óbolos pretendían sostener una fe en la religión y los poderosos que jamás encontraron. Excelente y meticulosa investigación.tan patética como muchos de los pasajes de la gloriosa Historia de una España sometida al dictado de los deseos de grandes, religiosos y cortesanos
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, querida Carmen.
P.D.: Este es el segundo comentario que te escribo en esta publicación, No sé que ha sucedido con el primero, desaparecido, escrito a las pocas horas de aparecer este artículo. Cosas de los electrones.
Lo de blogger es un misterio. A veces se hacen comentarios fantasma que luego reaparecen después de darlos por perdidos.
EliminarUn saludo