Autor: Roberto Domínguez Blanca
Publicado: Béjar en Madrid, nº 4.622. 15/10/2010.
Lo último que quedaba por hacer arquitectónicamente en todo el templo era la tribuna del coro de la iglesia, levantándose entre 1746 y 1748. Se resolvió en arco carpanel por el maestro cantero gallego Francisco Sino [1], quien cubrió el sotocoro con una bóveda de lunetos y cobró por su trabajo 2.400 reales. La barandilla del coro, que aún se conserva, fue encargada al cerrajero bejarano Francisco Javier Hernández por 1.347 reales y 26 maravedíes [2]. Años más tarde, entre 1761 y 1764, a Francisco Sino se le encomendará la creación de la nueva sacristía [3]. Este mismo artífice terminaría en 1764 la bóveda del sotocoro y la portada de acceso al órgano de la iglesia de Navacarros [4]. Consta que también trabajó en las iglesias de La Hoya, Puente del Congosto y de El Salvador de Béjar, así como en la Cárcel Real de la villa.
Con la iglesia y el camarín concluidos en lo arquitectónico, los esfuerzos de la cofradía se centran ahora en equipar y adornar convenientemente ambos espacios. Muchas de las obras que se están acometiendo se pudieron llevar a cabo gracias a que se desviaron para su provecho las rentas de las ermitas de Santa Ana, San Lázaro y la Magdalena, hasta que el obispo de Plasencia ordena en 1751 finalizar esta contribución[5].
Retablo mayor del Santuario, obra de Lucas Badarán y Ortega
En este momento y como es obvio, el esfuerzo de enriquecer el santuario se concentró en la cabecera y en el camarín. Se comienza por contratar un nuevo retablo mayor, que se ejecutó entre 1740 y 1741 por Lucas Badarán y Ortega, y se doró al poco de hacerse por Andrés de San Juan [6]. Ambos artistas eran vecinos de Béjar en ese momento.
El retablo es una pieza majestuosa de estilo churrigueresco, digno marco para el trono de la Virgen del Castañar. Vadarán consigue una obra de feliz resultado, rica, con la variedad de recursos propia del barroco dieciochesco (doseles, coronas, cortinajes, paños encolados, guirnaldas, angelotes, estípites, vegetación rizada en gran relieve…), sin estridencias y elegante y equilibrada dentro del estilo. De planta movida, tetrástilo, con un único cuerpo sobre predela y bajo ático semicircular, todo se ordena en función de la hornacina central trono de la imagen, de forma que la dorada estructura lígnea asemeja una gran aureola que envuelve la presencia divina de la Virgen. El total de su coste llegaría a los 7.834 reales con 6 maravedíes.
Lucas Badarán y Ortega fue un escultor al que también se le documenta ejerciendo su oficio en las iglesias de San Juan de Béjar, de Puente del Congosto y de Navalmoral de Béjar, donde salió de su mano el retablo del Crucificado Por motivos profesionales también fue vecino de Puente del Congosto y de Arévalo (Ávila). En cuanto a Andrés de San Juan, éste fue un dorador muy activo en las iglesias de Béjar y de su entorno hasta su muerte en 1791, citándosele, por ejemplo, en la tasación del dorado de un retablo pequeño y otras obras para la iglesia de Hoyorredondo (Ávila) [7] y en la realización del dorado del altar mayor de la iglesia se El Salvador junto a Lucas Sánchez Cerrudo [8]. Además de Béjar, fue vecino de Trujillo (Cáceres).
Los dos retablos colaterales son del estilo del mayor y seguramente también de Lucas Vadarán, pero actualmente se hayan transformados en parte por una intervención de mediados del siglo pasado. A la vez que el retablo mayor se hizo el del Santísimo Cristo. La principal modificación en este retablo fue en el arco de la hornacina, pasando de trilobulado (típico de los marcos que acogen Crucificados) al simple medio punto o arco semicircular. En este momento se traslada la imagen del Cristo fuera del retablo, situándose en el muro sur de la nave. Esta correcta escultura se talló en el período 1722-1729 por el hermano Domingo y policromada por el pintor ducal Ventura Lirios [9]. El otro colateral, el de Santa Lucía, parece coetáneo al del Santísimo Cristo. En ambos, lo más barroco son los soportes (fuste repleto de hojarasca en relieve en el segundo y columnas de orden salomónico en el primero) y el ático o remate.
Entre 1740 y 1741 se compró el desaparecido púlpito de hierro [10], que contaba con fuste y basamento granítico. Estas dos partes, como ya adelantamos, se conservan en la cripta. La reja que cerraba la capilla mayor se encargó en Salamanca en 1750, y tuvo un coste de 2.796 reales con 22 maravedíes, incluidos los portes del traslado [11]. Su segundo cuerpo o coronación se realizó entre 1751 y 1754 por 1.769 reales con 16 maravedíes. Sobre 1755 y 1758 se comienza a trabajar en los paneles que cubren los muros laterales de la capilla mayor y se hacen sus puertas, pero ya en estilo rococó. Elaborando los tableros de estos paneles se documenta entre 1761 y 1764 al tallista salmantino Miguel Martínez [12]. Paneles, tableros y puertas fueron dorados por su paisano Diego Enríquez. Sin embargo, desde 1959 hasta 1961 estos paneles laterales se rehacen, encargándose la tarea al artista bejarano Gil Laso Fraile, con la condición de que debía copiar la obra original [13], y a fe que lo consiguió.
Paneles que recubren las paredes laterales del presbiterio
Continuará
[1] Archivo Parroquial de San Juan Bautista de Béjar. Libro de la Cofradía de la Virgen del Castañar (1708- 1863), f. 120.
[2] Ibidem, f. 120 vº y 127 vº.
[3] Ibidem, f. 164 vº.
[4] DOMÍNGUEZ BLANCA, R. y CASCÓN MATAS, Mª del C.: “El proceso constructivo de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Navacarros y su patrimonio artístico”, en Revista del Centro de Estudios Bejaranos, nº 19, 2009, p. 72.
[5] Archivo Parroquial de San Juan Bautista de Béjar. Libro de la Cofradía de la Virgen del Castañar (1708- 1863), f. 129-130.
[6] Sobre estos artistas y la obra del retablo consultar el libro de Vicente Méndez Hernán El retablo en la diócesis de Plasencia, siglos XVII y XVIII, Universidad de Extremadura, Cáceres, 2004.
[7] GÓMEZ GONZÁLEZ, Mª de la V.: Retablos Barrocos del Valle del Corneja, Diputación Provincial de Ávila e Institución Gran Duque de Alba, Ávila, 2009, pp. 25 y 94.
[8] Archivo Parroquial de El Salvador de Béjar. Libro de cuentas de fábrica y visitas (1769- 1798), f. 45.
[9] Archivo Parroquial de San Juan Bautista de Béjar. Libro de la Cofradía de la Virgen del Castañar (1708- 1863), f. 55 vº.
[10] Archivo Parroquial de San Juan Bautista de Béjar. Libro de la Cofradía de la Virgen del Castañar (1708- 1863), f. 93.
[11] Ibidem, f. 127.
[12] Ibidem, f. 164.
[13] GÓMEZ GONZÁLEZ, E.-J.: Presencia teatina en el Castañar, PP. Teatinos, Béjar, 1996, f. 60; RIVADENEYRA PRIETO, O.: “Gil Laso Fraile”, en Catálogo de la exposición Béjar, artistas del ayer, Ayuntamiento de Béjar y Concejalía de Cultura de la Diputación Provincial de Salamanca, Béjar, 2003.
Que belleza, realmente.
ResponderEliminarUn abrazo.
Heermoso templo, y por lo que parece, bien cuidado.
ResponderEliminarMagnífica pieza arquitectónica y artística la de este Santuario, con su egregio retablo.
ResponderEliminarY buen guía tenemos con Roberto para no perdernos nada importante.
Un saludo.
Madre mia, es para contemplarlo con la boca abierta y no cerrarla ya en todo el dia. Bien empleados que estuvieron reales y marevedíes.
ResponderEliminarMadame, espero que los reyes se hayan portado bien con usted.
Feliz dia
bisous
El Gaucho Santillán: y es más bello aún en vivo y en directo.
ResponderEliminarSaludos
Aspirante: los bejaranos otra cosa no, pero en el santuario de la patrona se gastan lo que haga falta.
ResponderEliminarSaludos
Cayetano: podemos presumir de disponer del mejor experto en Arte de Béjar, no te digo más. Le agradezco mucho que nos cuente cosas en este espacio. Aunque sea cansino repertirlo lo hago porque realmente merece la pena.
ResponderEliminarSaludos
Madame Minuet: no se crea, que como he sido no mala, sino malísima, han estado un poco ramplones aunque he de decir que con razón, jejej
ResponderEliminarBesos aun navideños
Los paneles y los retablos son preciosos, una maravilla....
ResponderEliminarBesos
He estado allí Carmen. No tengo palabras para calificar la belleza del templo.
ResponderEliminarYa te sigo por el facebook. El del gorro con los niños ;D
Saludos
Me salio como verificación evil....
Entre mis muchas asignaturas pendientes, visitar Béjar; aunque gracias a ti, cada día la conozco un poco más.
ResponderEliminarAunque en la foto se ve a la Virgen del Castañar muy chiquitita me parece de gran belleza y ciertamente la hornacina la exalta, es como si toda la luz se concentrase en ella.
ResponderEliminarDisfruto mucho visitando Iglesias, Templos, Catedrales siempre encuentro mucha belleza y me sosiega su silencio.
Si las obras costasen a día de hoy un puñado de reales me haría construir una Catedral :D
Besos!
Muy bueno el reportaje de Roberto, que por cierto es un guia estupendo de su tierra, como dice Cayetano. Además lo hace muy ameno.
ResponderEliminarLa foto del altar mayor da idea del esplendor pecuniario de los bejaranos y los retablos de santa Lucía y el Cristo ( el de santa Lucía que se ve) parece una mezcla de distintas épocas de los retablos barocos... y si encima se reformó en el XIX...
Por cierto que iba a pedir a Roberto la referencia sobre Hoyorredondo, pero ya veo de donde lo ha sacado. Ja,ja,ja qué despiste.
Pregunta importante. Seguirá con la platería? ojalá.
Un abrazo
Es impresionante y bellísimo. A ver si se me da bien y tengo la suerte de poder hacerle yo las fotos pronto. La imagen de Santa Lucía también me ha llamado mucho la atención, parece más bien una muñeca vestida de reina que una mártir de la iglesia católica ...
ResponderEliminarUn beso, Carmen
Espléndido el retablo mayor de Badarán, sí señor. Una abrazo.
ResponderEliminarMe he quedado impresionado con el retablo mayor - y eso que mis preferencias nos son muy churriguerescas. ¡Para quedarse allí perdido!
ResponderEliminarSaludos, Carmen
Un retablo muy bonito y excelentemente conservado...
ResponderEliminarBellísimo retablo, sin duda, a pesar que a mí, particularmente, lo churrigueresco y lo excesivamente recargado del barroco final no me gusta, no me llenan, en ese aspecto soy más clásico. Algún día podre verlo in situ. Un abrazo.
ResponderEliminar¡Puro barroco!. Y a lo valiente. El trabajo es de una erudición indiscutible..
ResponderEliminarUn cordial saludo.
Las fotos son una pasada!!
ResponderEliminarPero verlo in situ lo es más...Da gusto sentarse allí a descansar después del paseo y poder admirarlo.
Que no harán los Bejaranos por su patrona!!
Un beso
Tu lo has dicho Laura: que no haremos los bejaranitos por nuestra Mari Casti!!!!
ResponderEliminarcarmen: Gracias por dar a conocer nuestra tierra, además, de manera tan linda.
Besazos!!!!
Mª Ángeles y Jose: me alegro mucho de que os hayan gustado.
ResponderEliminarBesos
Manuel: es verdad, que me dijistes que nos habías visitado. Pues a ver cuándo te vuelves a dar un paseo por aquí, jeje
ResponderEliminarMuchas gracias por hacerte seguidor.
Besos
Francisco Espada: se hace lo que se puede por atraer al público y a los visitantes.
ResponderEliminarUn abrazo
Wendy: imagínate la cantidad de catedrales que habría entonces en las fincas y chalets de cada cual, jejej Prometo poner alguna fotografía en que se vea a la Virgen mucho mejor, de verdad. Recuérdamelo si se me olvida, ¿vale?
ResponderEliminarBesos
Agev: ojalá quisieran muchos tener de guía a Roberto y poder disfrutar de todo lo que sabe... Para mí es una especie de maestro en todo lo concerniente a arte y él bien lo sabe.
ResponderEliminarPara ojos expertos como los tuyos se puede apreciar que quizás fusen los retablos del Cristo y de Santa Lucía los reformados por Gil Laso, pero la documentación y la historia oral dicen que fueron los paneles laterales.
En cuanto a la platería, siempre le animo a que continúe, que haga una publicación sobre el resto de la platería de Béjar y la comarca más allá del siglo XVI. A ver si nos hace caso.
Besos
Almalaie: parece ser que en la Edad Media existía en algún paraje del Castañar una ermita dedicada a esta santa y que desapareció con el paso del tiempo. La imagen se trasladó al santuario y, como sabes, es patrona de la vista, un sentido muy relacionado con la costura y el textil. Las mujeres la tiene especial beneración porque ellas eran las que remataban las piezas de paño.
ResponderEliminarBesos
Desde la terraza: es mucho mejor visto al natural, te lo aseguro.
ResponderEliminarBesos
Xibeliuss: después de darte un buen paseo y una buena caminata desde Béjar poder sentarse al fresco en periodos estivales, viendo tranquilamente el retablo es una delicia. Algunos hacen este recorrido todos los días, unos por motivos religiosos y otros por ocio.
ResponderEliminarSaludos
Churrigeresco, si es que solo por el nombre del estilo tiene que ser recargado por necesidad.
ResponderEliminarDebe de ser un bello templo.
Saludos cordiales
Jose Luis de la Mata: se restauró hace unos años. Una mañana cuando los teatinos, veladores y cuidadores del lugar, abrieron la iglesia parte del coronamiento del retablo se había venido abajo. Inmediatamente saltaron las alarmas y se buscaron subvenciones para restaurarlo por completo. Por eso está en tan buenas condiciones.
ResponderEliminarBesos
Paco Hidalgo: jajaja. Es que por aquí tenemos muchos ejemplos de churrigueresco porque como sabrás, aunque los hermanos Churriguera era naturales de Madrid, toda su labor artística la realizaron en Salamanca. De ahí nos viene el gusto por este estilo.
ResponderEliminarSaludos
Retablo de la vida antigua: tus enhorabuenas serán leídas y agradecidas por el autor, un asiduo de este blog, jejej
ResponderEliminarSaludos
Laura M.: lo mismo que me dices le he escrito yo ahí arriba a Xibelius. Sentarse al fresco después de una subida intensa desde Béjar y admirar el retablo es una gozada, creencias aparte.
ResponderEliminarBesos
Silvia: aprecio en ti mucho cariño por la patrona, ejeje
ResponderEliminarBesazos y espero que los Reyes Magos hayan sido generosos contigo.
Jose Eduardo: y más teniendo en cuenta que los Churriguera trabajaron aquí cerquita, en Salamanca, a pesar de ser paisanos tuyos, madrileños de pura cepa, jejeje
ResponderEliminarAbrazos
Ya me he leído las tres entradas.
ResponderEliminarPrecioso Santuario. No se merece menos la patrona de Béjar.
Ahora solo me queda hacerle una visita en vivo y en directo.
Abrazos, Carmen.
Feliz fin de semana.
Enrique: cuando te decidas aquí estaremos todos los bejaranos para recibirte. Anímate y pasa a ver el santuario y otros monumentos y riquezas naturales que tenemos por esta tierra.
ResponderEliminarSaludos
Vaya trabajo detallado está haciendo usted con el Santuario de Nuestra Señora del Castañar, realmente tengo que felicitarla por el nivel de profundidad y por el volúmen de información que nos presenta, me iumagino que habrá empleado muchas fuentes para ello.
ResponderEliminarMuchas gracias por acercarnos aquella maravilla a todos.
Un abrazo Carmen.
Pedro de Mingo: en realidad no lo he heco yo. Mi tarea se basa simplemente en colgarlo en el blog. Afortunadamente, aunque soy la creadora de este blog y lo coordino, además de subir mis propios artículos cuento con la ayuda de muchos colaboradores que amablemente me ceden sus textos. Siempre clasifico por medio de las etiquetas los textos y coloco el autor y lugar y fecha de publicación en la cabecera para que nadie quede excluído y para que otros investigadores puedan utilizar estos textos y citarlos convenientemente.
ResponderEliminarEn este caso el estudio sobre el santuario de la Virgen del Castañar lo está llevando a cabo Roberto Domínguez, historiador del arte e investigador. Para ello ha utilizado las fuentes que se citan en las notas al pie.
Traslado tu agradecimiento a Roberto y aprovecho para darle la enhorabuena.
Gracias por el comentario y un abrazo también para ti.
Hola, Carmen, magnífico retablo, fenomenal divulgación. La foto del blog es muy bonita. Gran blog.
ResponderEliminarSaludos bloggeros, amigos
Jose Antonio del Pozo: muchas gracias por pasearte por este blog y dejar tu comentario. Te invito a acercarte a Béjar a visitar esta tierra serrana tanto desde este espacio como en la realidad.
ResponderEliminarSaludos
Muchas gracias, Carmen, por ser tan en extremo generosa with me, ¿sabes? es esa muy rara y preciada virtud hoy en día, y cuando uno la encuentra, se queda uno sacudido e impresionado de gratitud. Me encantará acercarme a Béjar (yo soy segoviano, aunque vivo en los madriles) Sigo desde ya vuestro primoroso blog.
ResponderEliminarUn abrazo
Impresionantes las imágenes, en mi proxima visita a Salamanca, suelo ir de vez en cuando, visitaré Bejar.
ResponderEliminarque tengas un feliz fin de semana.
un abrazo.
Jose Antonio del Pozo: entonces vives relativamente cerca de Béjar. En dos horas y media se llega desde Madrid, así que ánimo.
ResponderEliminarSaludos
Ricardo Miñana: Béjar es una ciudad acogedora y con muchos recursos naturales y patrimoniales que merece la pena conocer.
ResponderEliminarSaludos y gracias por comentar
Que flipada el retablo...
ResponderEliminarSaludos y un abrazo.
Todo un tesoro el que tenéis en Béjar. Construido a finales del reinado de Felipe V y principios del de Fernando VI, tras los avatares de la Guerra de Sucesión y tras la firma de la Paz de Viena que ponía fin al conflicto austríaco-borbónico.
ResponderEliminarUn beso.
La sonrisa de Hiperión: veo que te ha gustado, jeje
ResponderEliminarSaludos
Carolus II: gracias por tu contextualización histórica. Como tú bien sabes fueron muchas las cosas buenas que ocurrieron en Béjar por entonces, entre otras la construcción en piedra de la plaza de toros. Tengo, por cierto, una buena noticia que darte. En breve colgaré un artículo sobre esta plaza centenaria escrito por el presidente de la comisión organizadora del III Centenario de nuestro coso taurino.
ResponderEliminarBesos
He llegado hasta aquí desde un blog que ambos visitamos. Me gustan tu blog: lo seguiré. Te dejo el mío: Tijerasdepapel, por si quieres eharle un vistazo.
ResponderEliminarSaludos
Carmen, no dejes de asomarte a mi ventana...Hay algo para ti
ResponderEliminarBesicos.
Pásate por mi blog, a recoger un detalle
ResponderEliminarUn saludo¡¡
Antorelo: gracias por comentar y visitar este blog. Ahora mismo me paso por el tuyo.
ResponderEliminarUn saludo
Cabopá: ahora mismo me paso.
ResponderEliminarGracias anticipadas.
Javier: hoy es el día de los Reyes Magos, jejeje
ResponderEliminarGracias a todos por vuestros comentarios y como siempre a Carmen por dejarnos publicar en su magnífico blog.
ResponderEliminarLo de la platería pues ahí seguimos con ello. Poco a poco. Aún con todo siguen apareciendo piezas que no he catalogado, por ejemplo en
Cantagallo.
Respecto al artículo, quería comentaros que el autor del retablo principal, en función de qué fuente estemos manejando, se le llama Lucas Badarán,Baradán o Barragán (como es más conocido), pero el siempre firma como Badarán.
Similar es el caso de quien ejecutó la tribuna, que lo mismo le llaman Francisco Sino, Signo o Dosino.
Un saludo.
Qué bonito,Carmen...cada día nos traes algo nuevo de tu hermoso pueblo que espero poder visitar muy pronto...una maravilla la ermita y preciosa la Virgen.
ResponderEliminarGracias y besos¡¡
Carmendy
Roberto: muchas gracias por tu participación y las aclaraciones.
ResponderEliminarSaludos
Carmendy: ten en cuenta este santuario porque es una de las visitas obligadas dentro del recorrido artístico de Béjar.
ResponderEliminarBesos