Autor: Jorge Zúñiga Rodríguez
Todos los biógrafos de Alonso de
Ercilla y Zúñiga (Madrid 1533-1594) coinciden en destacar su vínculo familiar con
los duques de Béjar a través de su madre doña Leonor de Zúñiga, asunto que
confirmaba la condición de noble del autor de La Araucana. En la corte de Carlos V, donde se crió como compañero
del príncipe Felipe y a la que su madre viuda había ingresado como guardadamas
de la reina al intercambiar el cargo por su señorío de Bobadilla, había por lo
demás otros Zúñiga del mismo linaje, y el propio emperador contaba en el
gobierno, intra y extra peninsular, con la colaboración de varios de ellos,
concediéndoles grandes distinciones y privilegios y dispensándoles una estrecha
amistad.
Retrato de Alonso de Ercilla y
Zúñiga pintado por El Greco, Museo Hermitage
Consciente de la importancia del
apellido de su estirpe materna, de las cuatro menciones que hace de sí mismo en
La Araucana tres son sólo con el
apellido Zúñiga. También lo hacían así sus hermanas, que firmaban María de
Zúñiga y Ercilla y María Magdalena de Zúñiga respectivamente, según lo rescata
el historiador chileno José Toribio Medina en su Vida de Ercilla, 1917, y no menos otro hermano, Juan de Zúñiga y
Ercilla, nombrado capellán de Carlos V en 1535.
Firmas
de las hermanas de Alonso de Ercilla y Zúñiga