11 de septiembre de 2017

Los Lidón, música bejarana para cuatro reyes de España

Autor: Ignacio Coll Tellechea

El texto en el que está basada esta entrada fue publicado originalmente en el número 52 de El Día de Salamanca el 17 de junio de 2017.


La música de cámara acompaña a los monarcas y demás miembros de la realeza por todos los tronos que se precien. Scarlatti, Haydn, Mozart y Bach son apellidos sobresalientes vinculados durante varias generaciones a las cortes europeas, donde la música era un instrumento de poder más que un divertimento.

 Retrato de Mariano Lidón


En España hay varios ejemplos, quizá no tan notables como aquellos. Una de esas sagas musicales hunde sus raíces en Béjar, y su historia acaba de ver la luz a través de la investigación de Josefa Montero, cuyo discurso de ingreso en el Centro de Estudios Bejaranos se ha publicado con el título de La familia de José Lidón: Biografía, música y política. El trabajo fue presentado el 3 de junio pasado en el Ayuntamiento de Béjar.

3 de septiembre de 2017

Dos notas sobre la apariencia en el linaje de los Duques de Béjar



Autor: Jorge Zúñiga Rodríguez

     Si el aspecto o parecer exterior debe corresponder a la posición o estatus que alguien ocupa en la sociedad, sorprende encontrar al menos dos notas contradictorias en personajes que representaron la cumbre de este linaje. La primera aparece en la Crónica Burlesca del Emperador Carlos V, escrita por quien ahora se considera propiamente un componente de la familia ducal de Béjar, el célebre Don Francés deZúñiga.   


Crónica Burlesca del Emperador Carlos V.
Edición crítica de José Antonio Sánchez Paso, 1989

     Poseedor de una lengua acostumbrada a decir verdades (La afilada pluma de don Francés de Zúñiga por Carmen Cascón, Pinceladas de Historia Bejarana marzo 2012), no vacilaba don Francés en describir duramente a los integrantes de la corte del monarca, audacia o imprudencia que al final le costó la vida. Al mismísimo emperador, que padecía del prognatismo característico de los Habsburgo, le dirige esta advertencia puesta en boca de un villano de Aragón: ¡Nuestro señor, cerrad la boca, que las moscas de este reino son traviesas! (Placiéndole al monarca el consejo, mandó dar al labrador trescientos ducados)         

Carlos V, por Lucas Cranach
Museo Thyssen-Bornemisza de Madrid

28 de agosto de 2017

Una mujer como lazo entre Plasencia y Santiago de Chile



Autor: Jorge Zúñiga Rodríguez

        Considerada entre los grandes personajes de la historia de Chile en el contexto de un panteón eminentemente masculino, la placentina Inés de Suárez llegó acá a los treinta y siete años de edad, con antecedentes personales que ya daban para una novela.

La actriz chilena Fernanda Urrejola en un proyecto fílmico de Chilevisión, 2016. Foros.fotech.cl

       En el reportaje Inés de Suárez refugiada en la ficción (La Tercera 05/09/2015) el periodista Pedro Bahamondes Chaud describe la participación de la única española en la conquista de los confines australes del planeta, y establece diferencias entre los relatos de la gesta. Sobre el traumático episodio de la primera defensa de Santiago, cita al historiador Benjamín Vicuña Mackenna en Historia crítica y social de la ciudad de Santiago, 1869: Fue ésta la primera mujer que formara su hogar en este suelo de dulces hogares, y aquello que han contado del degüello que hizo de siete caciques por su propia mano, no es sino uno de esos plagios de escritores pedantes que quisieron pintarla como Judith, esta caricatura demonizada de la mujer.

21 de agosto de 2017

Mujeres extremeñas en el asentamiento español en Chile



Autor: Jorge Zúñiga Rodríguez


Inés de Suárez nació en Plasencia en 1507. Su madre, mujer laboriosa y sencilla, le enseñó el oficio de costurera y la figura de su padre, de quien nada se sabe, fue reemplazada por la de su abuelo, carpintero ebanista. Era Inés poco sociable y sólo se entendía con su hermana Asunción. Inducida por su abuelo casó con Juan de Málaga, de quien no tuvo hijos y que pronto marchó a América. Pasaron los años sin noticias de su marido e Inés, que tenía temperamento, consiguió una licencia del rey y fue a buscarlo. Al enterarse que este había muerto, se las ingenió para obtener una pensión de viudez, y por añadidura recibió también una encomienda de tierras y de indios en Cuzco, Perú.         




Inés de Suárez representada en una teleserie. Enterartenoticias.blogspot.com



Tocó la casualidad que la encomienda de Inés lindaba con la del también extremeño Pedro de Valdivia, que se aprestaba a partir a Chile. A pesar de que Pedro era casado en España, ambos se atrajeron e Inés decidió acompañarlo. El permiso para viajar le fue extendido a Inés como sirviente doméstica de Valdivia para evitar problemas con la Iglesia. En el nuevo destino, donde Inés es considerada una de las fundadoras de la capital, desempeñó un papel muy importante, siendo descrita por el historiador moderno Tomás Thayer Ojeda como una mujer de extraordinario arrojo y lealtad, discreta, sensata y bondadosa, que disfrutaba de una gran estima entre los conquistadores

14 de agosto de 2017

Algunas aportaciones al estudio del urbanismo y la vivienda medieval en Béjar (5ª Parte y final)

Autor: Antonio Avilés Amat
Publicado: Béjar en Madrid, nº 4.779 (16/06/2017), p. 6.


5.-PERVIVENCIA DEL URBANISMO Y DE LA CASA MEDIEVAL


     Como ya se ha aludido más arriba, en determinadas zonas del conjunto histórico, apenas ha cambiado la inicial configuración urbanística impuesta por el primitivo lugar de asentamiento de la población aunque, ya a finales del XVIII y en los más próximos y recientes siglos XIX, XX y los años transcurridos del XXI, la ciudad se ha extendido considerablemente fuera del perímetro circundado por la casi desaparecida muralla, sobre todo hacia el este y menos, al mediodía. Por ello, todavía es posible encontrar en los barrios y calles del casco histórico, como La Antigua, Barrio Neila o Barrionuevo, la pervivencia ––al menos en su aspecto externo y el acceso al interior del habitáculo a través de amplios zaguanes–– de las viviendas bajomedievales en la ciudad contemporánea. Y ello con las lógicas modificaciones devenidas por el paso del tiempo, el bienestar de sus moradores o, en algunos casos, los nuevos usos asignados a las mismas. Tal es el caso, ya citado, de la casa solariega del siglo XV donde actualmente se ubica el Museo Judío “David Melul”.   

 Fachada sur del Museo Judío "David Melul"
                        

     Se halla construida ocupando un solar de casi 160 metros cuadrados y posee además de la planta baja, un primer piso y otro bajo cubierta que, en su momento, pudo estar destinado, como sobrado o desván, a almacenamiento de granos, frutos y otros productos. El aparejo es de piedra de irregular tamaño de granito local dispuesta en hiladas horizontales, en seco, sin ningún tipo de mortero; en alguna ocasión aparece, circundando algún pequeño vano, el ladrillo y, en otras, de relleno asociado al sillarejo. En el interior abundaban las maderas en vigas, balaustres, dinteles o como postigos de los vanos.