Voy a hacer un paréntesis a esta historia de la figura de los Hombres de Musgo para anunciarles que Mathías, el Rey Viudo de España, y su blog Café Stereo han tenido a bien distinguirme con dos condecoraciones.
La primera, la suya, la Noble y Distinguida Orden de Mathías, bajo la protección de nuestra Señora del Pilar.
La segunda, una insignia personalizada. Según sus propias palabras: Las abejas por Béjar, el libro dorado por la Constitución de 1812, que unos ascendientes de ella ayudaron a redactar, y la flor de lis florentina por su ascendencia italiana.
En efecto, entre los miembros de mi árbol genealógico tengo el placer de contar con Andrés Sánchez de Ocaña Gómez (Béjar, 1767- Alba de Tormes, 1829). Entre otros cargos fue diputado en las cortes de Cádiz de 1812 por Salamanca, miembro del Consejo Real y del supremo de Hacienda cuando estos reinos estaban regidos por el "Indeseable" Fernado VII. En Béjar formó parte de la Junta de Defensa Militar en 1808 y fiue administrador de las rentas reales., además de poseer fábrica textil. Como los bejaranos creo que ya habrán deducido, fue padre del bejarano José Sánchez- Ocaña (Béjar, 1798- Madrid, 1898), ministro de Hacienda durante los gobiernos de Istúriz y Narváez, Senador Vitalicio durante la Restauración, Director General de la Deuda Pública y miembro de la Orden de Carlos III. Sin embargo, una sevidora desciende de Teresa Sánchez-Ocaña, hija y hermana de los anteriores, casada con Andrés Hernández-Agero Hernández-Bueno, de la burguesía local de Béjar.
Por otra parte, soy descendiente de un corregidor valenciano, Vicente Sanahuja y Mey, que estuvo en Béjar allá en 1820, abogado de los Reales Consejos, y Juez de la Chancillería de Valladolid, sala de lo criminal. El apellido Mey me parecía un poco extraño y siempre me intrigó. Buscando en internet me enteré de que de origen flamenco aunque con muchas conexiones con Italia. En 1543 un tal Juan Mey, flamenco, fue el primer impresor de Valencia y su taller fue muy reconocido y afamado durante el siglo XVI.
La flor de lis más que a mi ascendencia italiana, podría corresponder a mis ancestros franceses, pues el Cascón de mi apellido procede de Gascuña (gascón). En efecto, en el siglo XI Raimundo de Borgoña, casado con la infanta doña Urraca, hija de Alfonso VI, repobló con francos la zona de la Sierra de Francia (de ahí el nombre). Un antepasado mío, José Cascón, procedente de Mogarraz (pueblecito de la Sierra de Francia) se asentó en Béjar a finales del siglo XVIII para trabajar en el textil.
La bandera que lo recorre es la Holandesa por mis antepasados los Vanerden Ufruel que vinieron a Béjar allá por el siglo XVIII, de la mano del duque de Béjar, para enseñar a los naturales la técnica del tintado de paños. Junto a ellos figuran en mi árbol los Yun o Jun y los Rodulfo, flamencos.
Muchas gracias de nuevo a Mathías por tomarse la molestia de diseñar estas condecoraciones.
La primera, la suya, la Noble y Distinguida Orden de Mathías, bajo la protección de nuestra Señora del Pilar.
La segunda, una insignia personalizada. Según sus propias palabras: Las abejas por Béjar, el libro dorado por la Constitución de 1812, que unos ascendientes de ella ayudaron a redactar, y la flor de lis florentina por su ascendencia italiana.
En efecto, entre los miembros de mi árbol genealógico tengo el placer de contar con Andrés Sánchez de Ocaña Gómez (Béjar, 1767- Alba de Tormes, 1829). Entre otros cargos fue diputado en las cortes de Cádiz de 1812 por Salamanca, miembro del Consejo Real y del supremo de Hacienda cuando estos reinos estaban regidos por el "Indeseable" Fernado VII. En Béjar formó parte de la Junta de Defensa Militar en 1808 y fiue administrador de las rentas reales., además de poseer fábrica textil. Como los bejaranos creo que ya habrán deducido, fue padre del bejarano José Sánchez- Ocaña (Béjar, 1798- Madrid, 1898), ministro de Hacienda durante los gobiernos de Istúriz y Narváez, Senador Vitalicio durante la Restauración, Director General de la Deuda Pública y miembro de la Orden de Carlos III. Sin embargo, una sevidora desciende de Teresa Sánchez-Ocaña, hija y hermana de los anteriores, casada con Andrés Hernández-Agero Hernández-Bueno, de la burguesía local de Béjar.
Por otra parte, soy descendiente de un corregidor valenciano, Vicente Sanahuja y Mey, que estuvo en Béjar allá en 1820, abogado de los Reales Consejos, y Juez de la Chancillería de Valladolid, sala de lo criminal. El apellido Mey me parecía un poco extraño y siempre me intrigó. Buscando en internet me enteré de que de origen flamenco aunque con muchas conexiones con Italia. En 1543 un tal Juan Mey, flamenco, fue el primer impresor de Valencia y su taller fue muy reconocido y afamado durante el siglo XVI.
La flor de lis más que a mi ascendencia italiana, podría corresponder a mis ancestros franceses, pues el Cascón de mi apellido procede de Gascuña (gascón). En efecto, en el siglo XI Raimundo de Borgoña, casado con la infanta doña Urraca, hija de Alfonso VI, repobló con francos la zona de la Sierra de Francia (de ahí el nombre). Un antepasado mío, José Cascón, procedente de Mogarraz (pueblecito de la Sierra de Francia) se asentó en Béjar a finales del siglo XVIII para trabajar en el textil.
La bandera que lo recorre es la Holandesa por mis antepasados los Vanerden Ufruel que vinieron a Béjar allá por el siglo XVIII, de la mano del duque de Béjar, para enseñar a los naturales la técnica del tintado de paños. Junto a ellos figuran en mi árbol los Yun o Jun y los Rodulfo, flamencos.
Muchas gracias de nuevo a Mathías por tomarse la molestia de diseñar estas condecoraciones.
¡Mis felicitaciones por tus dos condecoraciones!. Me ha dejado impresionada tu árbol genealógico, hasta personajes de la política y orígenes flamencos ^^.
ResponderEliminarUn enorme abrazo, feliz fin de semana
Madame, enhorabuena por este nombramiento que compartimos. Procuraremos mostrarnos siempre dignos miembros de la Orden de Mathias, que tan alto honor nos confiere.
ResponderEliminarFeliz fin de semana
Bisous
Carmen, enhorabuena!!!
ResponderEliminar¡Qué interesantes orígenes! Holanda, Italia...Me ha encantado! Un besito!
Todo un prestigio de árbol genealógico el tuyo, Carmen. Qué gran honor.
ResponderEliminarMi más sincera enhorabuena por tu premio. Muy merecido, sin lugar a dudas.
Un saludo!
¡Felicidades, Carmen!
ResponderEliminarEnhorabuena. Ya decía yo que esta chica valía mucho.
ResponderEliminarUn saludo.
Felicidades Carmen por este premio en forma de condecoración y que yo he recibido al mismo tiempo que tú y me enorgullece.
ResponderEliminarSaludos!
Felicidades, Carmen. Disfruta mucho de los hombres de musgo este domingo y luego cuéntanoslo todo. Besos.
ResponderEliminarDe viernes y por tu casa, como siempre.
ResponderEliminarSaludos y un abrazo enorme.
¡Que bonitas! felicidades guapísima, sin duda te las mereces. un abrazote!!!
ResponderEliminarFelicidades Carmen por tus premios,estaba claro la historia forma parte de tus origenes,de tu vida, emana por cada uno de los poros de tu piel, se nota y traspasa a tus lectores.
ResponderEliminarEnhorabuena.
Carmen, enhorabuena por la condecoración...al final tanto hablar de flamencos y neerlandeses y resulta que tú misma desciendes de estas gentes que vinieron a la "lejana Béjar" a enseñar sus técnicas textiles.
ResponderEliminarUn saludo.
Enhorabuena Carmen. No sabía yo que tenías tan ilustres antepasados.
ResponderEliminarUn abrazo.
Magnolia: muchas gracias. El árbol genealógico he tenido que hacerlo con paciencia hasta llegar, en algunas ramas, hasta el mismísimo siglo XVI.
ResponderEliminarUn besito
Madame Minuet: yo, al menos, no sé si será digna de merecerlo, pero se hará lo que se pueda.
ResponderEliminarUn besito
Ana Trigo: seguro que todos tenemos antepasdo ilustres. Sólo es cosa de inadagar en el pasado.
ResponderEliminarUn abrazo
Pablo D: muchas gracias. Se hace lo que se puede y los antepasados viene en el pack genético, jejej
ResponderEliminarUn abrazo
Xibelius: muchas gracias.
ResponderEliminarUn saludo
Cayetano: ¡me vas a poner colorada, querido compañero historiador!
ResponderEliminarUn abrazo
Dissortat: enhorabuena también para i. A mi me ha hecho una ilusión grandísima.
ResponderEliminarUn saludo
Almalaire: no te preocupes que voy a seguir con más explicaciones sobre esta tradición y muchas, muchas imágenes.
ResponderEliminarUn saludo y gracias
La sonrisa de Hiperión: puedes dar cuantas vueltas quieras. Te doy me permiso, jejej
ResponderEliminarUn saludo
Silvia: muchas gracias por tus calurosas y amables palabras. Siempre animando esta página común a todos.
ResponderEliminarUn saludo
Juana María: ¡Qué bonitas palabras, Juana! Muchas veces pienso que los antepasados, esos seres de los cuales posees algo en tu código genético, pero a los que nunca vas a conocer aunque formen parte de tu ser, llaman en tu conciencia para que les descubras y les saques de las sombras del olvido.
ResponderEliminarUn besote
Carolus II: es que suelo guardarme algunos datos reveladores, como los buenos investigadores. Como ves yo también desciendo de esos maestros flamencos que tanto te atraen. Probablemente hagamos entre un Historiador del Arte, un expecialista en textil y servidora un artículo sobre estos personajes tan atractivos de la Historia de Bejar.
ResponderEliminarUn saludo
Juan Carlos: muchas gracias.
ResponderEliminarUn abrazo
Carmen: Ya eres también de la nobleza.
ResponderEliminarPoco a poco vas consiguiendo títulos.
Ahora solo falta que te adjudiquen los territorios correspondientes en los que gobernar, .... y cobrar los impuestos y prebendas, como ha pasado siempre y, poco a poco, Duquesa.
Mira a ver si necesitas un administrador de las rentas, que desciendo de Julián Yagüe, que entendía mucho de esto.
Abrazos. Jero.
Oh Carmen, me alegra que te haya gustado mi sencilla condecoración
ResponderEliminarMuy interesante el significado que le dan a los símbolos de la orden, solo con decirte que en el blog de la Dame Masqueé por poco la acusan de bonapartista
Buen fin de semana, saludos
Jerónimogr: ya sabeis que vos me superais en diginidades, rentas y privilegios, señor marques y Prior de la Serenísima Orden de los Caballeros Abdones. De todos modos consultaré con su muy digno antepasado Julián Yagüe en cuanto me invistan con mis condecoraciones y me concedan la explotación sobre los predios que me corresponden.
ResponderEliminarUn saludo
Mathías: qué cosas se inventa la gente, jejej. Al fin y al cabo esto forma parte del juego bloguero y no tiene nada que ver con política, religión u otras intereses más o menos desvelados. Somos una comunidad unida por nuestra afición por la Historia, en parte podríamos ser considerados frikies, según el argot moderno.
ResponderEliminarUn saludo y reitero mis gracias
Preciosa enseña, carmen. Y me honro de ser amiga de una persona con ascendientes tan ilustres. ¿Será por eso que sabes tanto? Un besazo enorme.
ResponderEliminarIsabel Romana: creo que el saber no se lleva en la sangre, sino que se adquiere con tiempo, interés y perseverancia. Cada uno vale por sus obras y no por las de sus antepasados, ¿no te parece?
ResponderEliminarUn besazo