27 de marzo de 2021

Siguiendo la pista a la Virgen de las Angustias de Béjar a través de la documentación. Procedencia

Autora: Carmen Cascón Matas

Publicado: Béjar en Madrid, nº 4.852 (07/08/2020)

     La primera noticia historiográfica más reciente sobre la talla de Nuestra Señora de las Angustias data de mediados del siglo XX y pertenece a don Juan Muñoz [1]. Basándose en un escrito inédito del escribano del Ayuntamiento de Candelario del siglo XIX, Joaquín Peña Rico, nos narra la historia de la monja terciaria franciscana María García Morales, conocida con La Morala. Resumiremos sus visiones milagrosas explicando que experimentaría en casa de la fabricante Antonia Hernández Ajero[2] una de aquellas en la que contempló a la Virgen sentada a los pies de la cruz, sosteniendo en los brazos a Su Hijo muerto y llevada en andas por un coro angélico que cantaba el himno del Stabat Mater Dolorosa. María relató que la Virgen le dijo: Vengo para concederte lo que me pides. Coloca en la iglesia del Convento San Francisco una imagen mía en la que yo esté representada tal como aquí me ves. Y diciendo esto, sacó una llave y, por la llaga del costado, abrió el pecho y habló: Aquí está el amor. Pon aquí tu corazón. 

 

Nuestra Señora de las Angustias 

 

         El empeño de dos mujeres, La Morala como visionaria, y Antonia Hernández Ajero como mecenas, permitió que este deseo se viera cumplido. Y así se instaló un altar y una imagen dedicada a la Virgen Dolorosa en el convento de San Francisco por una nada desdeñable suma de 14.000 reales. Es de notar que don Juan Muñoz indica su fuente bibliográfica al final de su texto, no especificando qué datos son de su cosecha y cuáles de Joaquín Peña Rico o de Fray Francisco Yagüe, de quien parece bebió el escribano candelariense para escribir su historia sobre La Morala.

       Si seguimos estos datos sobre su procedencia y denominación obtendremos que la advocación primera de esta escultura era Virgen Dolorosa o de los Dolores y su origen el convento de San Francisco. Ahora bien sabemos que fue trasladada en ocasión de la desamortización a la parroquia de Santa María la Mayor entre 1838 y 1841 [3] junto al Nazareno del convento de la Piedad. No tendría sentido que se llevase en un carro desde San Francisco a la Piedad para ser de nuevo cargada hasta Santa María con el Nazareno, ¿o sí? Es la primera duda que me asalta y que pone en jaque la hermosa historia que narra don Juan Muñoz en la Ofrenda

La llaga del costado oculta la cerradura del sagrario


       La segunda es por qué se eligió Santa María y no El Salvador como lugar de devoción última. Cierto es que muchos de los bienes del convento de San Francisco pasaron a la iglesia de El Salvador en ocasión de la desamortización, como una talla espléndida y desaparecida de San Antonio de Padua, pero no esta escultura de la Virgen de los Dolores. La causa podría estribar en que el párroco de Santa María era a la vez que arcipreste, el encargado de hacer el reparto de bienes. De hecho así lo afirma en una carta en la que se queja del oprobio que sufren las imágenes de culto en los conventos abandonados y en la que afirma que le tienen prometidos el Nazareno y la Virgen Dolorosa[4]

 

 La imagen de vestir de Nuestro Padre Jesús Nazareno o Nazareno de las Monjas

 

       Existe otra explicación que he escuchado recientemente de que Julián Yagüe y su yerno Nicolás Rodríguez Vidal, los compradores del convento de la Piedad, pudieron decidir mandar las dos tallas a Santa María por motivos personales. Pero creo que en este campo nada tendrían que decir por encima de la autoridad del arcipreste, a quien el gobernador eclesiástico había encargado la distribución. 

 

 Nicolás Rodríguez Vidal. Foto sacada del web del Senado


      Por la documentación existente parece que había un acuerdo tácito de repartirse los bienes conventuales entre las parroquias[v] de la siguiente forma: los del convento de las Isabeles a San Juan Bautista (entre ellos el Cristo del Perdón), los del convento de San Francisco entre San Juan Bautista y El Salvador (San Francisco de Asís, Santo Domingo a la primera; San Antonio de Padua y la Virgen de los Dolores a la segunda) y los del convento de la Piedad a Santa María (Nazareno y la Virgen de los Dolores).

 


  Convento de San Francisco de Béjar

 

       Y si el lector está atento a lo expuesto podrá comprobar que la advocación de la talla seguía siendo en el siglo XIX Virgen de los Dolores y que no se documenta una, sino dos: una en el convento de San Francisco y que podría haber pasado a El Salvador, y otra en el convento de la Piedad que pasaría, o no, a Santa María. La existencia de estas dos tallas bajo la misma advocación está abalada por un documento de concesión de indulgencias expedido en Madrid en 1756[6]. Si esto fuera cierto, la Virgen de los Dolores sería pasto de las llamas en el incendio de la iglesia en 1936. Se destruiría, pues, la imagen salida de las visiones de María La Morala

 

La talla procesionando por las calles de Béjar

 hace unos años

 

      A finales del siglo XVIII se observa una división en cuanto a advocaciones se refiere: a la de San Francisco se la sigue llamando Virgen de los Dolores y a la del convento de la Piedad, Virgen de los Dolores o Piedad. En un documento fechado en 1837 en el que se inventarían la orfebrería del convento de San Francisco se especifica que entre los bienes desamortizados se encontraban una corona de los dolores de plata y unas potencias que se corresponden con los que hoy luce la talla de la Virgen de las Angustias a falta del corazón atravesado de espadas. Pero es que también una Soledad o una Virgen Dolorosa en solitario las pueden portar.

           A finales del siglo XIX, una vez trasladada la imagen a Santa María se sabe que en su “Retablo del altar mayor que consta de dos cuerpos, en el primero esta colocada la Virgen de los Dolores con la imagen de su Santísimo Hijo en los brazos, teniendo Este en el costa derecho una cavidad dorada por dentro para colocar la Sagrada Hostia el Jueves Santo, tiene llave de plata inferior para cerrarla; son separables del altar” [7]. Por tanto el costado del cristo se utilizaba como sagrario en sustitución del sagrario del retablo mayor, retirado hacia otro emplazamiento de la iglesia. A principios del siglo XX la talla se colocó en el sotocoro de la iglesia para poder permitir así una mejor devoción por parte de los fieles. 

 

 Retablo mayor de la iglesia de Santa María de Béjar 


      ¿A que conclusión llegamos? ¿Es la Virgen de las Angustias una talla procedente del convento de la Piedad o del convento de San Francisco? Si lo primero fuera cierto, y podría serlo porque se documenta en el sotocoro de su iglesia una Virgen de la Soledad en el lugar de eterno descanso de los duques [8], la talla se debería al mecenazgo de un duque de Béjar, probablemente el duque don Joaquín. ¿No es bonito pensar que esta talla protegiera el eterno descanso de los señores de Béjar, entre ellos del Buen Duque don Juan Manuel, muerto en Buda (Hungría) y enterrado después en el cementerio de San Miguel? Si proviniera del convento de San Francisco la historia relatada por don Juan Muñoz sería cierta y esa imagen tan querida no habría sucumbido pasto de las llamas en 1936

Continuará



[1] MUÑOZ GARCÍA, Juan. «La sierva de Dios María de Jesús Peña García, terciaria franciscana». En Ofrenda a la Santísima Virgen del Castañar Excelsa Patrona de Béjar y su comarca. 1963, pp. 217-225.

[2] CASCÓN MATAS, Carmen. «Una mujer del siglo XVIII fabricante y mecenas». Béjar en Madrid, nº 4.520 y 4521.

[3] «711 Reales y 28 maravedíes gastados en la traslación y colocación en la Iglesia de Santa Maria de las dos imágenes de la Dolorosa y Jesús Nazareno del orden del señor Gobernador Eclesiástico del Obispado según consta de recibos». DOMÍNGUEZ BLANCA, Roberto, y CASCÓN MATAS, Carmen. «Retablística, escultura, pintura y artes industriales en Béjar desde el siglo XV al 1900». HERNÁNDEZ DÍAZ, José Mª, y AVILÉS AMAT, Antonio (Coords.) Historia de Béjar Volumen II. Dip. Salamanca, Centro de Estudios Bejaranos y Ayunt. Béjar, 2013, p. 517.

[4] AP San Juan Bautista de Béjar (APSJBB). Documentación suelta. Dado a conocer en el artículo de la nota 5.

[5] De esto dimos unas breves pinceladas en «Apuntes de la desamortización en Béjar (1836)». Béjar en Madrid, 2019.

[6] AP Santa María de Béjar (APSMB). Indulgencias (1752). Documentación suelta.

[7] Así se describe la colocación de la talla en el inventario de la parroquia en 1893. APSMB. Libro de fábrica de 1893.

[8] Victoria Ponce de León, duquesa de Béjar, dispuso en su testamento que la imagen de Ntra. Sra. de la Soledad, que ésta tenía en su oratorio, se colocara en el coro del convento de la Piedad de Béjar, según documento fechado en Madrid en 1665. No sería ésta de la que tratamos ahora, claro está, pero bien pudiera haber sustituido a esta anterior. «Traslado hecho por Andrés de Caltañacor, del testamento de Victoria Ponce de León, [(VIII)] duquesa de Béjar, y de los codicilos». Archivo Histórico de la Nobleza, OSUNA, C.253, D.131.

 

10 comentarios:

  1. ¡Qué interesantes son estas historias! Y qué curioso es lo del la llaga del costado con la llave del sagrario.
    Muy buen trabajo.
    Un abrazo, Carmen

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  2. Un poco truculento lo de la llaga en el costado con llave y cerradura, sobre todo para los no creyentes; pero las tradiciones es lo que tienen: van tejiendo en el sentir popular una urdimbre que dan sentido a sus celebraciones.
    Un saludo, Carmen.

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  3. Es preciosa la talla.

    Muy interesante la documentación que has aportado.

    Besos

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  4. ¡Qué gusto da leer todo lo que escribes, Carmen, tan puntillosamente detallado en todos sus extremos! Te felicito por tu bien hacer.
    Un abrazo.

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  5. Hola Carmen:
    Me gustan las tallas que calificamos como de "Semana Santa". En particular encontré interesante eso de la llave.
    Una imagen parecida a esta, procesiona en mi pueblo en Venezuela, Santa Teresa del Tuy. No sé si será tan antigua como esta, pero me impresionó la similitud entre ambas.

    Besos

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  6. Una imagen de gran belleza con un curios lugar que ejerce de Sagrario en estas fechas.
    El hecho de que dos imágenes tendrían el mismo nombre puede hacer su seguimiento.

    Saludos.

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  7. Que tengas una buena Semana Santa Saludos

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  8. Será muy interesante la continuación Carmen. Las tallas son preciosas.

    Abrazos.

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  9. La imagen de esta Piedad, aparte la originalidad del sagrario que esconde la imagen de Jesús, es preciosa, como de inspiración divina.
    Un saludo.

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  10. ·.
    Excelente trabajo de documentación. Hay que tener dotes para ello, claro.
    Un abrazo Carmen


    LaMiradaAusente · & · CristalRasgado

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"No existen más que dos reglas para escribir: tener algo que decir y decirlo." Óscar Wilde.