A veces, el ramalazo de la nostalgia encamina mis pasos a la antigua estación de tren. Allí paseo entre viejos raíles oxidados, palancas para el cambio de agujas, topes de frenado, arcos metálicos, curiosos sistemas para bombear agua a las locomotoras, una pintoresca grúa colocada sobre un basamento de piedra, andenes, muelles de carga y, por supuesto, esas peculiares construcciones que siempre llamaron mi atención por su curiosa arquitectura.
Permanecen mudas y semiderruidas las casas de los ferroviarios, pero se han restaurado recientemente el edificio de la antigua estación y alguno de los locales adyacentes, lo cual ha sido una excelente idea. Espero y deseo que el fin para el que van a ser destinados, ese Centro de Ocio Juvenil que tanta falta hace en Béjar, revitalice esta zona y la saque del lamentable estado de abandono en que ha estado sumida los últimos años.
Desde la Estación se tiene una hermosa panorámica de Béjar. Según hacia donde se mire puede verse gran parte de la muralla, el antiguo palacio de los Duques de Béjar, las torres de varias iglesias, la sierra, El Castañar, la Peña de la Cruz , el valle de El Rosal, el viaducto, ... Pero la misma estación es en sí un bonito paraje.
Fotografía antigua de la Estación del Tren. Béjar.
Extraída del blog Archivo fotográfico y documental de Béjar
El emplazamiento de la estación se realizó en este trozo llano cuando los ingenieros decidieron trazar la vía por Navalmoral, construyendo un túnel que, atravesando Béjar, sacase directamente el tren a la zona del puente de San Albín. Como es conocido, ese ilustre prócer que fue D. Jerónimo Gómez-Rodulfo (nacido en 1810 en una gruta en el paraje de nuestra Sierra conocido como Navamuño, durante la Guerra de la Independencia ), deseaba que la estación se ubicara en el paseo de Santa Ana, pero los ingenieros lo desaconsejaron por las dificultades técnicas que presentaba el puerto de Vallejera y la necesidad de hacer un viaducto de gran altura cercano a Ledrada, para salvar los accidentes del terreno.
D. Jerónimo Gómez, que tanto hizo para que se construyera esta línea férrea, no pudo ver cumplido su deseo de ver llegar el primer tren, pues falleció poco antes de que esto sucediera, en la última década del siglo XIX. Es de justicia reconocer que en la construcción de la línea férrea que pasaba por Béjar influyeron también decisivamente, entre otros, D. Esteban Anaya, yerno de D. Jerónimo Gómez-Rodulfo (ambos desde Béjar), y D. Jerónimo Rodríguez Yagüe desde Madrid. (ver Béjar en Madrid de 16-05-1922).
Vista actual de la estación del tren
desde las murallas. Béjar
Algún día puede que escriba acerca de D. Jerónimo Rodríguez Yagüe, fabricante de paños y diputado a Cortes en Madrid, personaje de gran influencia en el Béjar de la segunda mitad del siglo XIX y muy bien relacionado en la corte. Pienso que fue un fabricante textil con gran visión de futuro, y que su temprana muerte en 1903 privó a la industria textil de uno de sus adalides. Estaba casado con Dña. Manuela Rodríguez-Arias.
El tren llegó tarde a Béjar en comparación con otras zonas textiles, pero se erigió inmediatamente en motor de progreso. En efecto, sin el tren no hubieran podido llegar a nuestra ciudad numerosas máquinas textiles, que por su volumen y peso eran imposibles de transportar entonces por otros medios. También se hizo enseguida imprescindible –aparte de para viajar personas- para el transporte de combustibles como el carbón y de mercancías (lana, productos manufacturados, etc). Para demostrarlo será suficiente con dar algunos datos: en 1918 entre La Estambrera y La Illana (propiedad de B. Redondo y de García y Cascón) podían lavar once mil kilos diarios de lana, con un consumo diario de tres toneladas de carbón en La Estambrera y de dos en La Illana (Béjar en Madrid de 15-09-1918). Imaginen ustedes cómo transportar once toneladas diarias de lana o cinco toneladas de carbón diario a principios del siglo XX sin el auxilio del ferrocarril. Simplemente, imposible. Y eso sólo considerando dos fábricas, que en Béjar había muchas más.
Estado de las vías, en total abandono, en la actualidad
El ferrocarril lo fue todo para Béjar. Llegó un poco tarde pero fue uno de los elementos básicos sin los que la industria textil y otras industrias no hubieran podido sobrevivir. Luego desapareció de nuestras vidas (¿para siempre?) con gran malestar de los bejaranos, si bien hemos de reconocer que también con un poco de apatía por parte de muchos de nosotros, porque ¿cuántos lo utilizábamos?. Hoy día hay otros medios de transporte, es cierto, pero estamos en la época de la alta velocidad y el tren se está revalorizando cada vez más.
Me gusta esa estación, y me gusta pasear por ella. Me recuerda cuando en alguna ocasión me sentaron al lado de la ventana en el Colegio Salesiano, y desde allí veía de vez en cuando llegar y salir los trenes y evolucionar las máquinas echando vapor por sus chimeneas. O cuando íbamos a jugar por allí y poníamos una perra gorda en la vía para que el tren la aplastara.
Es una buena idea que se recuperen la mayor parte de los edificios de la estación y, mejor aún, si se arregla un poco y se adecenta toda la zona de las vías como zona de paseo. Aunque ya no tengamos tren. A lo mejor algún día vuelve.
MUY BUENO EL ARTÍCULO. ME ENCANTA QUE A LAS IMAGENES DEL BLOG LAS UTILICEIS (VOSOTROS) PARA TAN BUEN FIN. GRACIAS POR EL ENLACE
ResponderEliminaruN SALUDO A TODOS
Madame, ojala que vuelva!
ResponderEliminarYo tengo una debilidad especial por las estaciones de ferrocarril, o mas exactamente por los trenes. Me parece un medio encantador de viajar. Resulta muy romantico y evocador.
Esperemos que todo eso pueda ser recuperado.
Feliz fin de semana
Bisous
Archivo Fotográfico y Documental de Béjar: con todo el atrevimiento he osado tomarme la licencia de "apropiarme" de una de tus imágenes para ilustrar el artículo de Javier. Sobre todo porque si se habla del pasado y no tenemos una idea gráfica de él es más difícil imaginárselo.
ResponderEliminarAdemás, así te promociono el blog que siempre es bueno. La gente se queda prendada de la foto y tienes más posibilidades de que entren. Espero que no te haya molestado.
Un besazo y nos vemos
Madame Minuet: Béjar logró tener ferrocarril, y además de manera tardía, como necesidad al desarrollo industrial textil de la ciudad. Una vez desaparecido este medio de vida nos arrebataron el tren (parece ser que ya no éramos nadie y buena gana de mantenerlo en funcionamiento). Ya no había lana que transportar, ni piezas, ni maquinaria, ni mano de obra.
ResponderEliminarAhora algunas instituciones trabajan para que vuelva, sobre todo porque sería un buen nudo de comunicaciones en la zona oeste de España- Vía de la Plata.
Besos e igualmente
Siempre me ha atraído el ferrocarril y ver el abandono del que pasa por aquí me hace sentirme triste. Si se pasea por las vías con tranquilidad se puede observar que esta línea tenía fecha de caducidad mucho antes de que decidieran su fin. Primero los pasajeros y después las mercancías dejaron de circular, pero es que ahí hay railes de la década de 1.920... ¿por qué no se fue renovando y manteniendo con vistas a que continuara al menos para mercancías? Porque además, incluso con el trazado actual, eso sería factible si se renueva la infraestructura.
ResponderEliminarEn la década de 1.980, incluso antes, alguien decidió apostar por la carretera y llenarnos de autovías el país (increíble que seamos el tercer país del mundo por número de km.). Cierto, viene bien circular por ellas, pero también es cierto que su auge es debido a que en muchos casos se abandonó el ferrocarril a su suerte.
La alta velocidad solo es factible para pasajeros, las mercancías deben circular más lentas y hay un programa de la UE (New Opera) que intenta recuperar vías en desuso para ello. ¿Le tocará a la nuestra?
Ostras... que rollo he metido.
Un abrazo.
El rápido desarrollo del transporte por carretera ha sido, junto con la desidia de nuestros responsables(¿?) políticos, la principal causa de que eliminaran tantos y tantos tramos de vía en España. Una pena. A mi es un transporte que me encanta. De hecho mi primer viaje de novios fue con un billete de ferrocarril abierto Murcia-Venecia. Subir y bajar en cualquier tren y en cualquier estación. Precioso.
ResponderEliminarHay que apoyar cualquier iniciativa que surja para resucitar al tren. Lo que también ocurre ahora es que hay tantos intereses que todo se desvirtúa y tergiversa en favor de unos cuantos que solo persiguen enriquecerse.
Buf! M'enrrollao.
Feliz sábado, Carmen.
Abrazos.
Carmen, bellísimo texto! Las estaciones de tren tienen algo muy especial, es como si siempre estuvieran esperando para llevarnos a caminos insospechados, a vivir una aventura inesperada. Un besito, guapa!
ResponderEliminarLeyendo este artículo me viene a la mente aquella época,cuando utilizábamos el tren,con bastante frecuencia por cierto pués no teniamos coche,y la verdad es que se siente cierta nostalgia y mucha pena pues las vias estan tomadas por la maleza y la sensación de abandono es total.Recuperar estas vias en una MILLA VERDE sería una buena opción pues me temo que el tren ya pasó y no creo que vuelva,una pena. Muchos besos Carmen.
ResponderEliminarLa fachada reluciente de los AVEs esconde el cadáver del ferrocarril en España, los trenes de alta velocidad son útiles para salvar grandes distancias, el resto es mera política y palabrería.
ResponderEliminarEl verdadero ferrocarril el que vertebraría el país se está muriendo, los pueblos se están quedando sin tren en aras de la rentabilidad económica, y pongo ejemplos:
entre Madrid y Zaragoza el nuevo AVE solo para en Guadalajara y Calatayud dejando al resto sin nada.
En Ciudad Real ya no hay regionales, solo se puede ir en AVE a Ciudad Real o a Puertollano, el resto solo lo ven pasar.
La conexión entre Toledo y Aranjuez ya no existe.
Cuando el Ave a Levante esté terminado los pueblos conquenses de Huete, Tarancon o valencianos como Utiel y Requena se van a quedar sin el...
Lo dicho una pena...
en el ámbito meramente fotográfico yo tambien alucino con la estacion, creoq ue lo sbes, tengo fotos sensacionales, algunas fotomontadas con viajeros de otra época y todo
ResponderEliminarsi quieres un dia te enseño
saludos
Juan Carlos: no has emtido ningún rollo, me ha encantado tu reflexión porque no se queda en un mero lamento y "morriña" del pasado, sino que aporta información, posibles soluciones y ¿futuro?. Si estuviese en nuestra mano los trenes volverían a circular por esos raíles, vetas de hierro engullidas por la naturaleza. Ahora con la autovía parece un sueño aún más irrealizable, pero todo llegará, por lo menos tengo esperanza de ello, lo que no sabemos es el tiempo que se tardará en realizarse.
ResponderEliminarUn beso
Enrique: a mí es un medio de locomoción que, a parte de poseer cierto aire romántico, es cómodo y seguro. Los coches no me inspiran confianza (no es lo mismo que circule una persona por un raíl que decenas de coches por carreteras empapadas de agua, hielo, en mal estado además).
ResponderEliminarEn tren además se puede conocer a gente nueva, te puedes pasear por él, admiras mejor el paisaje.
Un beso
Ana Trigo: muchas gracias. Enviaré tus felicitaciones al autor del texto, mi buen amigo Javier, de tu parte.
ResponderEliminarOtro beso también para tí
Sin duda Béjar y su industrialización empujarón al inicio de esta estación y como resultado el tren .
ResponderEliminarEl artículo como siempre genial , ubicación , datos biográficos , imagenes ......
Las estaciones de tren siempre han sido un lugar lleno de historias de una vida .
Creo que el rehabilitarla es fantástico y además sería bueno convertir la vía en vía verde .
Felicidades .
Un gran beso .
Cuando Carmen Cascón me propuso publicar algunos de mis artículos en su Blog, mi primer pensamiento acerca de su acogida fue de cierto escepticismo. Pero ella estaba convencida de que muchas personas los leerían e incluso los comentarían.
ResponderEliminarEl resultado no puede ser más elocuente.
Gracias a todos los que comentáis mis artículos con tanto fundamento y aportando en este concreto perspectivas incluso diferentes (pero siempre complementarias) a las que imaginé cuando di el agradable paseo por la estación de Béjar que me inspiró el artículo.
Gracias también a Carmen por difundir mis escritos y por seleccionar esas acertadas fotografías que ilustran mis textos.
Y también por tomarse la molestia de contestar a cada uno de vosotros de manera siempre adecuada.
Un abrazo para todos.
Javier R. Sánchez
Guenas moza, me he encontrado con Javier por la calle y hablaos de este articulo
ResponderEliminarjavier es un currante de esta nuestra historia contemporanea
Juana María: pues ¿sabes que yo espero que las generaciones venideras recuperen el tren?. Por lógica, si todo va mejor, tendrán en cuenta que es un medio de locomoción cómodo y fiable. O, quién sabe, quizás inventen otro y ya no sea necesario... Y si no, pues que lo utilicen siempre en beneficio de todos y nunca lo dejen como vestigio muerto del pasado.
ResponderEliminarUn besazo
José Luis: quizás la solución esté en compatibilizar ambas modalidades (AVE y regionales), pero en fin, en política ya se sabe. Los intereses económicos están por encima de toda lógica posible.
ResponderEliminarUn saludo
Cuentos brujos: no me extraña que sea una de tus inspiraciones. Ya te dije que a Oscar le encantó la foto que presentastes al concurso del bejar.biz.
ResponderEliminarEl día que nos conozcamso tendremos mucho de qué hablar, jejej.
Un beso para los dos
Loli Martínez: en la cuestión del tren de Béjar ya ves que las opiniones son dispares. Los hay que apostamos por recuperar el tren de nuevo y otros, que dados por vencidos, todo hay que decirlo, y viendo que no hay interés alguno por recuperarlo, se conforman con transformarlo en vía verde. Ambas soluciones son correctas y viables si las autoridades quieren. Pero cuando no hay voluntad...
ResponderEliminarUn besazo
Javier: siempre a tu disposición, ya sabes. ¿Has visto que seguidores tan majos tengo? Lo bueno de tener un blog es interactuar con tus lectores, saber qué opinan, qué artículos les gustan. Esto tiene riesgos, es verdad, sobre todo para los que no tienen mucho tiempo o si las opiniones son desfavorables. Pero, ya ves qué bien nos tratan.
ResponderEliminarY lo más interesante: das a conocer Béjar a través de la web, un medio de masas cómodo y que llega a más gente.
Muchas gracias a tí Javier.
Un besazo, profe
Cuentos brujos: pues sí, es un experto con todas las letras y muy buena gente, cosa que no es habitual en estas lides. A ver si le animamos a hacer su historia del textil en Béjar que hace mucha falta.
ResponderEliminarBuenas noches, mozo
Hola Carmen:
ResponderEliminarQue entretenido este relato sobre los ferrocarriles. Que lástima que el tren tardará en instalarse en Béjar, casi no lo pudiesteis disfrutar y repentinamente os lo arrebataron!
Siento especial predilección por viajar en este medio de transporte, te envuelve en una atmosfera ideal para las reflexiones.
Un Beso
Soy uno más de los fascinados por el tren y sobre todo por las estaciones, tanto de las grandes ciudades como de los pueblos.
ResponderEliminarPrecioso artículo.
Saludos.
Sería fundamental la recuperación de la ruta vía de la plata apostando de esta forma por un transporte limpio pero por desgracia falta la voluntad política necesaria para llevarlo a cabo.
ResponderEliminarOSCAR GONZÁLEZ
Lady Caroline: en realidad, pudimos disfrutar del tren alrededor de un siglo, pero siempre vinculado al desarrollo textil. En el momento en que éste entró en crisis definitiva y mortal (siempre lo estuvo perviviendo a trancas y barrancas), el ferrocarril fue suprimido.
ResponderEliminarUn beso y gracias por tu visita
Xibeluis: espero que un día nos muestres en tu blog esas preciosas fotografías de estaciones que tienes guardadas, jejej.
ResponderEliminarUn saludo
Excelente tu entrada sobre el tren de Béjar, ojalá se rescate su vuelta esperada.
ResponderEliminarLa verdad es triste dejar que se muera un medio de locomoción tan práctico, cómodo y precioso como son los trenes.
Me acordé de un haiku del poeta Eduardo Moga.. aquí te lo dejo amiga Carmen.
"La tarde se hace
metacrilato y sueño
en el vagón."
Abrazos!!
Carmensabes: muchas gracias. Transmito tus felicitaciones al autor del artículo que nos hace reflexionar sobre el pasado, el presente y el futuro de Béjar a través del ferrocarril.
ResponderEliminarPrecioso Kaiku que viene al pelo de este artículo. Un magnífico regalo.
Besos tocaya
Una vez más, acertado.
ResponderEliminarAhora, todos nosotros, tenemos la obligación de hacer que nuestros nietos puedan, y ojalá no se les ocurra hacerlo, poner 1 céntimo en la vía y pasado el tren, parezcan 50 cént.
Béjar lo necesita!!