15 de julio de 2023

El exvoto encargado por la duquesa de Plasencia Leonor de Pimentel y la conexión sumeria

Autor: Jorge Zúñiga Rodríguez

 

Nuestra actualidad está llena de constructos que vienen del pasado, a los que reasignamos nuevas funciones o nuevos significados. Se podría hablar de un reciclaje de recursos de la memoria colectiva (¿economía de la razón?), o tal vez de una falta de apertura a nuevos horizontes en el campo de las ideas. Especialmente en el terreno religioso, son innegables los lazos que la cultura europea mantiene con sus precedentes, que equivocadamente consideramos extintas.     

 

 Exvotos sumerios. Pinterest.com

 

Los sumerios -que nos legaron los primeros avances de la civilización, pero también el miedo y la sumisión a dioses y reyes- agradecían los favores de las divinidades dedicándoles estatuillas, las que podían tener la forma de la deidad misma, la del beneficiado o de ambos a la vez. Originalmente confeccionadas en arcilla, más tarde fueron fabricadas en metal y son la base de lo que hoy conocemos como exvotos.

 

Exvotos con forma humana hicieron también los iberos, como los hallados a fines del siglo XIX en la cueva-santuario de la Lobera, municipio de Castellar, provincia de Jaén. Asimismo los fabricaron con forma de animales, tales las dos pequeñas cabras de bronce encontradas en Malpartida de Cáceres, de una de las cuales se instaló una réplica sobredimensionada en la plaza del pueblo. Los exvotos caprinos, hoy uno en el Museo Arqueológico Nacional y el otro en el Museo Víctor Balaguer de Barcelona, estaban dedicados a dea sancta Adaegina -la diosa santa Adegina-, “patrona” de Malpartida hace veintitrés siglos.

 

 3ª vitrina de derecha a izquierda. Unaventanadesdemadrid.com


En una vitrina de la Sala del Tesoro del muy bien montado Museo Nacional de Artes Decorativas, Madrid, se exhibe una imagen en plata sobredorada de unos 40 a 50 cm de altura, que representa a un adulto erguido sobre una peana, y arrodillado a sus pies, un niño ataviado militarmente.

Se trata del exvoto que Leonor Pimentel y Zúñiga, duquesa consorte de Plasencia, mandó confeccionar para agradecer a san Vicente Ferrer haber devuelto la salud -o la vida según otras versiones- a su hijo Juan de Zúñiga y Pimentel. El conjunto estaba destinado a la iglesia del convento que la duquesa y su tío y esposo, Álvaro de Zúñiga, mandaron construir en Plasencia al lado de su palacio (actual palacio Mirabel) en honor al santo.   

 

El exvoto placentino. Ucm.es

 

La duquesa habría encargado la obra al orífice Francisco de Toledo, que trabajaba para la casa ducal y el cabildo catedralicio, pero con más seguridad al moro y joyero Zalama, miembro de la comunidad musulmana de Plasencia, que bajo la protección del duque se hallaba en pleno florecimiento. 


En efecto, en el nimbo del santo y en la peana se observan esmaltes nazaríes con adornos propios de la cultura islámica, como la hamsa -para el mal de ojo- o mano de Fátima: Ponían a los niños manezuelas de plata pegadas e colgadas de los cabellos con pez e encienso, …e broslávanles (bordábanles) en el ombro de la ropa manezuelas de plata a que dizen hamsas.

 

El niño Juan, con espada al cinto y el escudo de Zúñiga. Commons.wikimedia.org

 

Y para completar el cuadro de las conexiones interculturales que bullían en la mente sobreprotectora y aperturista de la duquesa, y que arrancaban de Sumeria, se puede también observar que nudos de Salomón -contra hechizos- decoran varios de los esmaltes. Valdría la pena darse una vuelta por el número 12 de la madrileña calle de Montalbán para contemplar esta joya, que quizás debiera estar en Plasencia (El MNAD se promociona como uno de los museos más antiguos y ricos del llamado Triángulo del Arte de Madrid)    

 

 

Lecturas:

Blanco F., Antonio: Mitología de las procesiones. Antecedentes paganos de las procesiones cristianas. 1985

Gómez-Chacón, Diana: Linaje y devoción en la Plasencia del siglo XV: San Vicente Ferrer y don Juan de Zúñiga y Pimentel. 2016.

Hernández S., Francisco: Dos ejemplos de orfebrería vinculados a la familia Zúñiga en el contexto mudéjar del siglo XV. 2012.

Hernández S., Francisco: Una obra excepcional de la platería castellana bajomedieval con esmaltes nazaríes: el exvoto de don Juan de Zúñiga. 2016.

Kramer, Samuel: La historia comienza en Sumer. 1956.

López L., José: Simbología e iconografía religiosa medieval cristiano-musulmana. 2017.

Lorenzo A., Josemi: El nudo de Salomón. 2020.

 

 

4 comentarios:

  1. No sabía que los exvotos se remontaban tanto en el tiempo, pero claro las necesidades espirituales del hombre están ahí desde el principio de los tiempos. El exvoto de san Vicente Ferrer es una maravilla. Saludos y buen verano.

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  2. También yo creo que esa joya del pasado, debería estar en la ciudad de Plasencia. Madrid está saturada de obras procedente de muchas provincias de España.
    Un abrazo

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  3. Tiene razón "ventana de foto":se debería de repartir mejor estos patrimonios, pues afortunadamente tenemos un buen patrimonio.
    Aprovecho para desearte estimada Carmen un feliz día de tú santo.
    Bsos

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  4. Un hermoso ejemplar del arte medieval que bien creo debiera custodiarse en la ciudad de Plasencia que creo cuenta con lugares seguros donde custodiar.

    Saludos.

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"No existen más que dos reglas para escribir: tener algo que decir y decirlo." Óscar Wilde.