12 de abril de 2024

Las suegras de los duques de Béjar y la virreina del Perú

Autor: Jorge Zúñiga Rodríguez

      En su primer matrimonio con Leonor Manrique de Lara, Álvaro de Zúñiga, I duque de Béjar, tuvo por suegra a Leonor de Castilla, bisnieta de Enrique II de Castilla; y en el segundo, con su sobrina Leonor Pimentel y Zúñiga, a su propia hermana Elvira de Zúñiga. Su nieto y sucesor homónimo tuvo por suegra a su tía abuela Leonor Pimentel y Zúñiga al casarse con su tía María de Zúñiga, y el V titular, Francisco de Zúñiga, a la hermana de su padre, Leonor de Zúñiga, en su matrimonio con su prima hermana María de Guzmán y Zúñiga. 

 

Sepulcro de Leonor de Castilla, primera suegra de Álvaro de Zúñiga, I duque de Béjar, en el monasterio de la Consolación de Calabazanos, Palencia. Amigosdelpatrimoniodevillamuriel.blogspot.com

 

        Más o menos atenuada, la línea endogámica de parentesco por afinidad continuó hasta el matrimonio de Manuel de Zúñiga, X duque de Béjar, con su parienta María Alberta de Castro y Borja, hija de Ana Francisca de Borja y Doria, condesa consorte de Lemos y virreina del Perú, que en su ascendencia paterna contaba con Francisco de Borja -duque de Gandía y santo jesuita-, el rey Fernando el Católico y el papa Alejandro VI, y en cuya biografía destacan al menos dos episodios de alto mando ejecutados por mujeres.    

 

Uno de los retratos de Ana de Borja y Doria, suegra de Manuel de Zúñiga, X duque de Béjar

Jruizenlared.blogspot.com

         Nacida en 1640 en Gandía, Valencia, en el seno de la familia ducal, descendía por línea materna del almirante genovés Andrea Doria, que participó en las gestas navales de Carlos I. Al enviudar, a sólo meses de casada, del V marqués de Távara, contrajo matrimonio con Pedro Antonio Fernández de Castro, X conde de Lemos y VII marqués de Sarria, que en 1667 recibió el nombramiento de virrey de Perú directamente de la reina regente Mariana de Austria -primer episodio-, por lo que debió trasladarse a Lima con sus dos hijos nacidos en Madrid, María Alberta y Ginés.    

 

Palacio virreinal y otros edificios en la Plaza Mayor de Lima, Perú, a fines del siglo XVII. Es.wikipedia.org

 

         Apenas llegados a destino, tuvo el virrey que partir a Puno (1300 km al SE de Lima por actual carretera) a sofocar una rebelión, y dejó a su esposa como virreina gobernadora con todos los poderes inherentes al cargo, en disposición de una cédula real anterior que lo permitía pero que nunca había sido puesta en práctica. Así, durante los cinco meses de ausencia de su marido, Ana de Borja ejerció el mando efectivo del virreinato, conservándose en los archivos coloniales del Perú documentos con su firma que ordenan, mandan y resuelven (sin que nadie hiciese la menor observación, principiando por la Audiencia que reconocía su autoridad) hasta en territorios tan lejanos como Portobelo en Panamá (no existía aún el virreinato de Nueva Granada)

 

Firma de Ana de Borja en uno de los documentos de su mandato

Tuotrodiario.com

          Por el mismo período, alternaba la virreina las tareas de gobierno con las de su condición, pues se lee que salió del palacio la señora condesa de Lemus en su silla de manos, que estaba muy preñada, a la iglesia mayor con todo acompañamiento de los señores oidores, alcaldes de corte y el cabildo secular... Y a la señora virreina en esta ocasión le dieron la paz y la incensaron, y le dieron a besar el misal después del Santo Evangelio… Amaneció parida de un hijo la señora condesa de Lemus, que actualmente gobernaba por la ausencia del señor virrey conde de Lemus… a las cuatro de la tarde se cristianó el hijo del señor conde de Lemus virrey de estos reinos... fue grande acompañamiento de caballeros y todos con cadenas de oro y grandes joyas en los pechos... y todos los criados de S. E. traían cadenas.

        Continuando la labor iniciada por su tío Francisco de Borja, homónimo del santo que también había sido virrey del Perú, Ana hizo acelerar en Roma los trámites de la beatificación y luego canonización de la joven limeña Isabel Flores de Oliva, hija de un soldado natural de Baños de Montemayor (a 15.5 km actuales al SO de Béjar y en parte propiedad del ducado en la época) Cáceres, que durante el virreinato de su esposo fue finalmente elevada a los altares (su humilde ataúd de madera fue sustituido por uno de plata por voluntad y a expensas de la virreina).

 

Imagen de santa Rosa de Lima en Baños de Montemayor, Cáceres, Extremadura

Foro-ciudad.com

 

 

        A la muerte de su marido, acaecida al finalizar el cargo de virrey, Ana de Borja permaneció con sus hijos tres años más en Lima, a la espera de que concluyera el juicio de residencia al que fue sometido el gobierno de su consorte, conforme usualmente correspondía al término del ejercicio de un funcionario público. Habiéndosele exonerado de cargos, quiso sin embargo sufragar la única obligación que conforme al juicio todavía permanecía pendiente, pese a su no buena situación económica (?) de aquel momento.

        Su nieto Juan Manuel de Zúñiga, XI duque de Béjar, casó cuatro veces, por lo que tuvo por suegras sucesivamente a Manuela de Zúñiga y Silva Mendoza, duquesa consorte de Benavente; a Catalina de Moncada y Aragón, duquesa titular de Montalto y marquesa consorte de Villafranca del Bierzo; a Francisca Josefa Centurión de Córdova, marquesa consorte de Almuña; y a Juana Fernández de Córdova, duquesa consorte de Gandía.  

 

Juana Fernández de Córdova, por Claudio Coello, cuarta suegra de Juan Manuel de Zúñiga, XI duque de Béjar. Fundacionmedinaceli.org

 

       Finalmente, a Joaquín de Zúñiga, XII duque de Béjar y último de su apellido, su padre le concertó matrimonio con Léopoldine Élisabeth Charlotte de Lorraine-Marsan, y su suegra fue Élisabeth de Roquelaure, princesa consorte de Mortagne; y en su segundo matrimonio con Escolástica Gutiérrez de los Ríos y Rohan-Chabot, concertado por él, lo fue Charlotte Félicité de Rohan-Chabot, condesa consorte de Fernán Núñez.

 

Charlotte Félicité de Rohan-Chabot, segunda suegra de Joaquín de Zúñiga, XII duque de Béjar Ibncalez.blogspot.com

Lecturas:

Arco, Ángel del. Glorias de la nobleza española. 1899.

Cardador, Diego. El patrimonio histórico de Fernán Núñez. 2020.

Lavarello, Gabriela. Ana de Borja, X condesa de Lemos, primera y única dama gobernante del Perú. 2016.

Rodríguez Severiano et al. Calabazanos a la vista. La reina Católica y los Manrique, nuevos datos. 1951.

2 comentarios:

  1. El matrimonio entre familiares era muy común en las gente de alto linaje en aquella época.
    El sepulcro de Blanca de Castilla en Calabazanos quizás lo pase por alto en mis visitas al monasterio ya que siempre fue para ver la obra de Gómez Manrique el auto de Navidad.

    Saludos.

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  2. No cabe duda alguna de que las mujeres valemos mucho, no hay más que fijarse en Ana de Borja.
    Cariños.
    kasioles

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"No existen más que dos reglas para escribir: tener algo que decir y decirlo." Óscar Wilde.