Amigos de Béjar y sus historias

PROPIEDAD INTELECTUAL

El contenido de este blog, texto y fotografías, tienen derechos de autor. Si deseas utilizarlos cita siempre la fuente de la que proceden.

2/07/2025

Pueblos sin gente / 1 (3ª parte). Casas del Fraile cerca de Navacarros (ca. 1528-1946)

 4. Decadencia durante el siglo XIX

         La documentación de los siglos XIX y XX ofrece particular interés en los aspectos gráficos, pero muestra ya la decadencia de Casas del Fraile, su inevitable condición de despoblado y la consiguiente desaparición después de siglos de asentamiento humano. 

 
          Pasado el paréntesis de la Guerra de Independencia, la nueva centuria se estrenaba con las novedades administrativas de 1833, aquella forzada reforma promovida por Javier de Burgos a costa de las demarcaciones históricas de antecedentes medievales. En el documento que oficializaba el despiece, de 1834, se registra Casas del Fraile dentro del nuevo partido judicial de Béjar, sin más información (1). 

 1. Mapa nº 1 del Itinerario de Béjar a Ávila, por Otero García y Blake Orbaneja, 1852 (debajo, esquema de posición entre las localidades más cercanas).


        Mayor interés reviste la descripción del lugar que se recoge en el Diccionario Geográfico de Pascual Madoz, de 1847 para esta localidad, con entrada propia al margen de la cabecera del concejo, y que transcribo aquí desarrollando todas las abreviaturas: 


          CASAS DEL FRAILE: lugar ó barrio agregado al ayuntamiento de Navacarros (medio cuarto de legua), en la provincia de Salamanca (12 leguas), partido judicial de Bejar (1), diócesis de Plasencia (11), audiencia territorial y capitanía general de Valladolid (32): Situado entre los puertos de Vallegera y San Bartolomé, en la falda este de la sierra de Bejar. Tiene 6 casas, una iglesia anejo de la de Navacarros y una fuente para el surtido del vecindario. Confina el termino Norte (sic) con el de este último pueblo, San Bartolomé, la Hoya, Palomar alto y Candelario, en cuyo intermedio corre un arroyo llamado Oso (sic) que desagua en el río Cuerpo de Hombre (sic). Producciones: centeno, patatas, escelentes linos y algunos pastos y ganados. Población: con su ayuntamiento. (2) 


         Al margen de varios errores evidentes, entre los datos de interés cabe destacar la especificación de la distancia hasta Navacarros, de unos 695 m. si se considera la legua de 20.000 pies castellanos (3), el corto número de viviendas respecto de lo conocido tiempo atrás (sólo seis habitadas), la disponibilidad de una fuente de uso público y la existencia de un templo para la pequeña comunidad cuya edificación podría haberse producido en sus primeros tiempos (no olvidemos el vínculo directo con algún fraile), pero que carecería de entidad eclesiástica propia hasta épocas más recientes –quizá desde 1768, como vimos en el apartado anterior–, aunque anejada a la parroquia de su cabecera de concejo ochenta años después. El cómputo global de habitantes de Navacarros en el mismo Diccionario de Madoz era de 93 vecinos y 338 almas (coeficiente multiplicador de 3,63) para un total de 100 viviendas, incluidas las seis de Casas del Fraile, lo que supondría unos 20 habitantes (20,28) en este barrio o agregado, menos de la mitad de los que se anotaban en 1768 para el Censo de Aranda de 1773. 


       Cinco años después de la publicación del Diccionario se trazó el segundo mapa de la zona (el primero, como vimos, fue el de Tomás López de 1783). Se trata del Itinerario de Béjar a Ávila de los ingenieros Luis Otero y Joaquín Blake de 1852, en el que constan todas las poblaciones comunicadas por la carretera entre ambas ciudades o próximas a esta vía (4). Como se muestra en la fig. 1, el lugar de Casas del Fraile queda perfectamente localizado respecto de Navacarros y La Hoya, indicado como topónimo de entidad menor en el mapa nº 1 y referido a un par de edificaciones muy próximas y de distintas dimensiones (aproximadamente las mismas que aparecen representadas en el mapa de 1903, como veremos). En el mismo mapa de 1852 se consigna el número de vecinos de cada población principal, con 92 para Navacarros, lo que supondría aproximadamente 334 habitantes y los mismos 20 para Casas del Fraile si se mantuvo la proporción y número de viviendas documentadas en la época de Madoz: pero si sólo se conservaban dos casas, el número de habitantes podría haberse reducido en dos tercios, es decir, limitarse a tan sólo seis o siete habitantes (6,6), a razón de tres o cuatro miembros por vivienda y unidad familiar. 


        El tercer documento gráfico vino de la mano de Francisco Coello, el célebre cartógrafo que aportó su importante Atlas de España y sus posesiones de ultramar (5) a la obra escrita de Madoz. El despoblado se reconoce con su correcta localización en el mapa provincial de dicho atlas (fig. 2), trazado a una escala parecida a la del mapa de 1783. 

2. Mapa provincial de Salamanca por Coello y Quesada, 1867 (debajo, esquema de posición entre las localidades más cercanas).


         En el Censo de Población de 1877 (6) no consta ninguna referencia al despoblado, tan solo al núcleo de Navacarros sin especificar la consideración de sus pedanías históricas: 456 habitantes o 122 más que en el mapa de 1852, lo que, de mantener la proporción, permitiría suponer hasta 27 casafraileños, cifra que me parece poco verosímil debido a la evidente decadencia del despoblado en décadas anteriores.


5. Despoblamiento y desaparición de Casas del Fraile en el siglo XX


           En el mapa de Manuel Acebal trazado en 1903 (fig. 3), en realidad un croquis preparatorio para el Mapa Topográfico Nacional, se consigna el topónimo menor de «Casa del Fraile», en singular, para dos edificaciones cercanas situadas en las actuales parcelas catastrales 37213A002001330000KB (apéndice sur, junto a la carretera de El Barco de Ávila) y 37213A002001490000KX. El doble topónimo no se incorporó a las minutas de 1930 ni a las sucesivas ediciones impresas del MTN E / 1 : 50000, aunque sí las dos edificaciones nombradas en 1903 como «Casa del Fraile» (7). En la minuta conjunta («catastrón», fig. 4) se hace referencia a los trabajos topográficos realizados en 1930 (que no he podido consultar), aunque validados en 2 de diciembre de 1931 y en junio de 1946 (8). 

3. Croquis cartográfico del término municipal de Navacarros para el MTN, por Acebal y Campans, 1903 (izquierda: mapa completo; derecha, detalle con la ubicación de los dos edificios nombrados como «Casa del Fraile» marcados en rojo; el color es mío).


4. Minuta cartográfica o catastrón del MTN, ca. 1930-1946 (izquierda: área entre Navacarros y Casas del Fraile; derecha: detalle con las dos edificaciones del despoblado).



           La siguiente documentación disponible es de naturaleza fotográfica: los fotogramas aéreos correspondientes al Vuelo Americano Serie A (Project Casey Jones), de 1945-1946, como posibilidad más tardía. Lamentablemente, en esta serie fotogramétrica no se aprecian edificaciones que remotamente puedan ser identificadas como restos del despoblado de Casas del Fraile, ni siquiera las dos cartografiadas en 1946, lo que permite suponer su desaparición antes de ese año, fecha del primer vuelo sobre la zona (9). 


       En la cartografía posterior, y en concreto las ediciones del MTN E / 1 : 25000, hoja 553-III de 1996-1997 y de 2000, no consta ni el topónimo ni la representación de las dos edificaciones, por lo que igualmente cabe deducir que el despoblado había desaparecido por completo y sólo quedaba registro o noticia de su existencia en el conocimiento local y en la toponimia registral y catastral de las parcelas, como hasta ahora, únicos testimonios de la existencia del despoblado, pero de gran precisión e importancia. 


       La información catastral actualizada, fácilmente accesible a través del sitio web de la Sede Electrónica del Catastro (10), incorpora con gran detalle toda la toponimia menor de las parcelas que no es posible trasladar a los mapas de uso común, por lo que esta fuente cartográfica constituye un verdadero tesoro para localizar asentamientos o incluso elementos singulares ya desaparecidos, como el ejemplo de Casas del Fraile y otros despoblados que se estudian en esta serie. En concreto, el topónimo «Casas del Fraile» y «Casafraile» se asigna a 25 parcelas contiguas, ampliable a otras cuatro dudosas que completarían el hipotético término redondo del despoblado, si bien ninguna de las parcelas así nombradas conserva las edificaciones registradas en la cartografía anterior (fig. 5). Los límites del posible término de Casas del Fraile, comenzando por el este y en sentido horario, serían los siguientes: por el este, el término municipal de La Hoya y los pagos de Los Huertos, Prado de la Salud, Hoyo Rincón y Piezallana; por el sur, los pagos de Piezallana, La Tejera y Aceque; por el oeste, los pagos de Las Cerrás y Cogollo, no lejos de La Raya; y por el norte, junto al arroyo, los pagos de Las Veredas, Engarilla, Tejeruela y El Cubillo. Las parcelas dudosas llevan el topónimo de Escuajo al este, Hoyo Rincón y Piezallana al sur, y Las Cerrás y Cogollo al oeste; en este último caso, el apéndice más meridional de la propiedad actual es el que incluía la edificación mayor rotulada como «Casa del Fraile» en el croquis de 1903. 

 

5. Parcelas nombradas con los topónimos «Casas del Fraile» y «Casafraile» (marcadas en tono verde), así como otras relacionadas o dudosas (en tono azul), en la cartografía catastral actualizada, 2025 (el tratamiento de color es nuestro).


         Los testimonios orales vendrían a confirmar la desaparición de Casas del Fraile durante las primeras décadas del siglo XX, si bien todavía eran reconocibles algunos restos de sus edificaciones en torno a 1960. Así lo recuerda Miguel García en sus comentarios en el blog Pinceladas de historia bejarana, con referencia a que «aún podían apreciarse restos de construcciones» y a una interpretación local, transmitida por sus mayores, acerca de que la población casafraileña hubiera tenido origen judío (11).

6. Recapitulación y conclusiones. 

 
       Considerada la información histórica, cartográfica y registral, así como la derivada de testimonios orales, los límites fundacionales y hasta cierto punto «naturales» del término de Casas del Fraile en el siglo XVI, descritos desde el este y en sentido horario, serían los siguientes: por el este, el término municipal de La Hoya, amojonado desde finales de la Edad Media y probablemente invariable hasta hoy; por el sur, el antiguo camino a San Bartolomé, Becedas y El Tremedal; por el oeste, el antiguo camino a Navacarros, con el topónimo parcelario de La Raya como posible indicador de límite; y por el norte, el arroyo Engarilla, tributario del arroyo Gascón, que a su vez desemboca en el Río Frío antes de su confluencia con el río Cuerpo de Hombre (fig. 6). 

 

6. Plano del hipotético término de Casas del Fraile en su origen, respecto del núcleo de Navacarros (elaboración propia, 2025).

          A lo largo de estas páginas se ha podido constatar la discreta historia de un núcleo de población vinculado casi desde su origen al concejo rural de Navacarros, conocer el nombre de algunos de sus pobladores, observar su crecimiento en cuanto a efectivos de población y casas habitadas hasta su máximo en 1768-1773 (43 habitantes y 11 casas), hasta incluso disponer de iglesia propia ca. 1768-1847, y asistir a su decadencia y desaparición entre finales del siglo XIX y primeras décadas del XX. 


        No disponemos de información fiable para establecer las causas de su despoblamiento, pero no serían muy diferentes de las que se repitieron en otros pequeños asentamientos de la zona. En el caso de Casas del Fraile se pueden excluir las de naturaleza climática y manifiesta precariedad, tan presentes en los núcleos de montaña y economía silvo-pastoril (con buenos ejemplos en el área de Solana-Tremedal y el ya mencionado de Casas de la Sierra). Habría que pensar, más bien, en la dedicación de sus habitantes –como tantos otros de la comarca– a la vigorosa industria textil de Béjar en las décadas centrales del siglo XIX y el consiguiente traslado a la cabecera comarcal. Antes de esa circunstancia, los casafraileños se dedicarían a los mismos oficios y labores que sus vecinos de Navacarros: ganadería y agricultura de subsistencia con predominio de montes y pastos, huertas y frutales, escaso laboreo del cereal (sólo centeno) y mayor importancia del cultivo de los «escelentes linos» mencionados en el Diccionario de Madoz. Sobre este aspecto hizo un atinado comentario uno de nuestros lectores, Ángel María Ridruejo, que anticipaba esa dedicación industrial, tan ligada a medios rurales, por la proximidad del arroyo y los restos de una presa para la manufactura del lino, visible en el fotograma aéreo de 1946 (12); el testimonio de Madoz y la «presa de los fierros», rotulada sobre el arroyo Gascón en el croquis de 1903 (fig. 3), vendrían a confirmar tal extremo. El mismo lector aportó otra línea de investigación sobre el origen del topónimo Casas del Fraile, posible concesión a un fraile o freire vinculado a una orden militar (quizá la de Alcántara, por su relación con los Estúñiga, señores de Béjar), una hipótesis que sería interesante comprobar en algunas fuentes de archivo a las que no hemos tenido acceso (13). Puesto que esta serie se ofrece como una investigación abierta, enriquecida además por la aportación de los lectores, habrá lugar para completarla en el futuro. 


Próxima parada: La Redondilla, cerca de La Garganta (Cáceres).

NOTAS 

1. AA. VV., Subdivisión en partidos judiciales de la nueva división territorial de la Península é islas adyacentes aprobada por S.M. en el Real Decreto de 21 de abril de 1934, Imprenta Real, Madrid, 1834, p. 186. 

2. MADOZ IBÁÑEZ, Pascual, Diccionario Geográfico-Estadístico-Histórico de España y sus posesiones de ultramar, vol. 6, establecimiento tipográfico de Pascual Madoz y Luis Sagasti, Madrid, 1847, p. 49, voz «Casas del Fraile». 

3. Consideramos que la legua utilizada en el Diccionario es la de 20000 pies castellanas (5560 metros) establecida por Carlos III en 1801, lo que supondría 695 m. para el medio cuarto de legua consignado en el texto, una longitud algo inferior a los 850 m. reales, aunque tomados desde la iglesia parroquial; si se toman desde el centro del pueblo, la distancia sería de unos 700 m. 

4. OTERO Y GARCÍA, Luis, y BLAKE Y ORBANEJA, Joaquín, Itinerario de Béjar a Ávila, mapa nº 1, signatura Ar.M-T.1-C.3-42, 1852 (disponible en Biblioteca Virtual de Defensa, https://bibliotecavirtual.defensa.gob.es/BVMDefensa/es/consulta/resultados_ocr.do?id=2782&tipoResultados=BIB&posicion=4&forma=ficha). 

5. COELLO DE PORTUGAL Y QUESADA, Francisco, Atlas de España y sus posesiones de ultramar, mapa de la provincia de Salamanca, escala 1 : 200.000, Imprenta de Madoz y Sagasti, Madrid, 1867. 

6. Censo de Población de 1877, consultado a través del sitio web del INE (en este documento consta un municipio nombrado «Palomares» con 412 habitantes censados, cifra excesiva para el radicado en la comarca bejarana que debe referirse a otra localidad homónima dentro de la provincia). 

7. ACEBAL Y CAMPANS, Manuel, Plano geométrico del término municipal de Navacarros, escala 1 : 25000, 28 de marzo de 1903 (incluye correcciones del 16 de junio de 1908 y actualizaciones posteriores a 1967). 

8. SERVICIO GEOGRÁFICO Y ESTADÍSTICO, Minuta o catastrón del MTN, hoja 553, Béjar, E / 1 : 50000, ca. 1930-1946 (las firmas de los topógrafos y supervisores son ilegibles). 

9. Todos los fotogramas aéreos de las series A, B y C del Vuelo Americano están disponibles en el sitio web oficial del IGN, Fototeca Digital, https://fototeca.cnig.es/fototeca/. 

10. Ministerio de Hacienda, Dirección General del Catastro, Sede Electrónica del Catastro, Cartografía (vid. https://www1.sedecatastro.gob.es/Cartografia/mapa.aspx?pest=rc&from=OVCBusqueda&final=&ZV=NO&ZR=NO&anyoZV=&tematicos=&anyotem=). 

11. Testimonios de Miguel García del 31 de enero y del 5 de febrero de 2025, referidos a su niñez en torno a 1960 (vid. https://ccasconm.blogspot.com/2025/01/pueblos-sin-gente-1-1-parte-casas-del.html - comment-form). Más allá del carácter legendario y popular del hipotético poblamiento judío, podría tratarse de conversos o falsos conversos, extremo de notable interés que merecería la pena investigar. 

12. Aportaciones de Ángel María Ridruejo Cabezas en sus comentarios del 31 de enero, 1 de febrero y 18 de enero de 2025, publicados en Pinceladas de historia bejarana,  https://ccasconm.blogspot.com/2025/01/pueblos-sin-gente-1-1-parte-casas-del.html - comment-form y https://ccasconm.blogspot.com/2025/01/pueblos-sin-gente-i-2-parte-casas-del.html - comment-form). 

13. Entre las fuentes documentales sin consultar destaco las siguientes: archivos del Clero Regular (órdenes mendicantes) y de las Órdenes Militares, libros parroquiales de bautizados y difuntos, Censo de 1694, Respuestas Particulares del Catastro de Ensenada de 1752 (sin duda la documentación más detallada y relevante), inscripciones registrales archivadas en el Registro de Bienes Inmuebles de Béjar (con asientos desde 1863 hasta el presente) y cartografía catastral de la propiedad rústica realizada en 1930 (por no estar disponible en la Sede Electrónica del Catastro, pero sí en el AHPSA).


No hay comentarios:

Publicar un comentario

"No existen más que dos reglas para escribir: tener algo que decir y decirlo." Óscar Wilde.