Autor: Carmen Cascón Matas
Una buena noticia para el Centro de
Estudios Bejaranos ha sido la presentación de una nueva publicación sobre la
historia de nuestra ciudad. Nos referimos al acto que tuvo lugar el
pasado jueves día 10 de marzo en el Casino Obrero en el que tuvimos el
gusto de dar a conocer el libro Vuestros y de la causa obrera. La gran huelga de los “siete meses” en Béjar (1913-1914) de Manuel Carlos Palomeque López, trabajo galardonado con el premio “Ciudad de Béjar” en su edición número XIX (2015).
Tras
unas acertadas palabras del presidente del Casino Obrero, Ramón
Hernández Garrido, Antonio Avilés Amat, presidente del CEB,
presentó al conferenciante y desgranó el proceso de selección de este
trabajo como merecedor del premio.
Javier Ramón Sánchez Martín, miembro del
CEB y profesor de la ETSII, colaborador de este blog, contextualizó la situación social, política
y económica de Béjar en los primeros compases del siglo XX, el momento
en que se produce la grave huelga de los siete meses, aderezando su
exposición con una acertada proyección de fotografías y esquemas
explicativos.
Por último, el autor del trabajo, Manuel
Carlos Palomeque López, catedrático de derecho laboral de la Universidad de Salamanca, tomó la palabra para recomendar a los
asistentes la lectura de su libro, incidiendo en la trascendencia de la
huelga de los siete meses en la historia local y nacional, y su
relevancia en la trayectoria sindical de España. Declarada el 16 de diciembre de 1913 por diez sociedades obreras bejaranas, que integraban al grueso de los trabajadores textiles divididos por oficios (1.075 trabajadores en total), puso en jaque durante más de medio año a la producción lanera y fue el centro del debate parlamentario durante dos intensos días. Los motivos no nos parecen ajenos: la negociación de un nuevo convenio colectivo que incluía, por parte de los trabajadores, de una exigencia de mejora de las condiciones laborales y la regulación de horarios. Por otro lado, otro importante punto se encontraba en juego: la contratación de trabajadores sindicados, asunto que la patronal no estaba dispuesta a aceptar, al acatar con ello el control de sus obreros por parte de los sindicatos. Durante ese largo tiempo las fábricas permanecieron cerradas a cal y canto, hasta que el 27 de julio de 1914 volvieron a la actividad después de intensos meses de negociación entre patronos y obreros bajo el auspicio de arbitraje del Insituto de Reformas Sociales. La conclusión parece que no resultó demasiado favorable a los trabajadores porque dejó el derecho de contratación en manos de los patronos.
Laudo del Instituto de Reformas Sociales.
Imagen sacada de aquí
Manuel Carlos Palomeque narró también el
proceso de redacción de la obra y las dificultades que encontró en la
investigación de un tema tan denso y con tanta abundancia de documentos
dispersos, proceso integrado dentro del propio relato de los hechos.
Desveló a los asistentes que la decisión de emprender una empresa tan
significativa fue tomada como consecuencia de una conferencia que tuvo
lugar en Béjar en la conmemoración de los cien años de los
acontecimientos, en la que él comenzó a desgranar los documentos
hallados en los archivos locales. Dicho esto, pasó a explicar
someramente los puntos centrales de la huelga, los motivos que la
desencadenaron y quién
estaba bajo la identidad de Crotontilo, el pseudónimo que el mismo
utilizó para velar su identidad a la hora de presentarse al premio.
El
libro consta de 325 páginas divididas en cinco capítulos. El primero se
titula “La cuestión social en España en la crisis de la Restauración,
el segundo “Industria textil y conflicto social en Béjar en los albores
de la Gran Guerra”, el tercero “La huelga” (el centro del trabajo en
importancia temática y en número de páginas, capítulo subdividido en 16
apartados), el cuarto “Bibliografía, hemeroteca y documentación” y el
quinto y último “Apéndices”, con un índice onomástico y los tres
documentos más importantes en torno a la huelga transcritos
íntegramente. El texto, por cierto, viene acompañado con ilustraciones
en blanco y negro.
*Está ya a la venta en Bizarte, Béjar.biz on line y librerías de Béjar.
**En este enlace encontraréis el acto retransmitido en su totalidad, cortesía de BéjarInformación TV.
Suerte con la nueva publicación sobre la larga huelga que afectó a Béjar en dos años altamente conflictivos en todos los sentidos.
ResponderEliminarUn saludo.
Como Cayetano también os deseo suerte con esta publicación que me parece sumamente interesante.
ResponderEliminarBesos Carmen
Poder leer lo que fueron las huelgas en su día debe de ser interesante para la población de Béjar.
ResponderEliminarUn abrazo y éxito.
No estoy de acuerdo con la apreciación de que el resultado no fue favorable para los trabajadores porque dejó el derecho de contratación en manos de los patronos. La cuestión para mi es bien sencilla ¿quién contrata?, el patrón, ¿verdad?. Pues con eso está dicho todo; el que contrata tiene derecho a contratar a quien le apetezca sin que nadie se lo imponga desde fuera.
ResponderEliminarUn abrazo,
De acuerdo, supongo que se refiere a que el patrón puede contratar a quien quiera, pero las condiciones laborales no las puede imponer él; deberían ser negociadas con los trabajadores, directamente o representados, bien o mal, esa es la cuestión, por los asociaciones obreras.
EliminarMucho éxito para el libro. Está dedicado a un momento intenso en la historia de Béjar, y lo merece.
ResponderEliminarBesos Carmen
Muy interesante Carmen, un buen ejemplo de los que fue la lucha sindical (la de verdad) en la España del convulso inicio del siglo XX. Como vemos, Béjar seguía en el ojo de la noticia a nivel nacional y su nombre y sus problemas eran orden del día en el Congreso.
ResponderEliminarUn beso.
Aunque no fue del agrado de todos, la unión hace la fuerza esos siete meses de huelga dieron paso a que se reconociesen sus derechos.
ResponderEliminarMuchas gracias por dejar el enlace es muy interesante y se presta a reflexionar: que sin lucha y unión no se consigue nada.Y felicidades por ese bien merecido reconocimiento a ese estupendo trabajo, Béjar no nos deja indiferente y más con esa lucha sindical.
Un abrazo Carmen.
Siempre es interesante la aparición de un libro. Y más si sirve para aclarar qué sucedió realmente aquellos días, con tantas presiones e intereses por medio.
ResponderEliminarEnhorabuena.
Caramba, promete ser un trabajo de lo más completo. Se intuye toda la inmensa labor que hay detrás. Enhorabuena al autor, que ve felizmente rematado tanto trabajo con la publicación de su obra.
ResponderEliminarFeliz tarde
Bisous
Si que parece interesante el tema del libro y en especial para los bejaranos ya que así recuerdan una parte de su historia.
ResponderEliminarSobre el poder de decisión a la hora de contratar si que la tiene el patrón, pero claro esta que el obrero tiene derecho a sindicarse. La unión hace la fuerza y eso no solo en el caso de los obreros ejemplo de ello lo tenemos en el sector lácteo hoy día al enfrentarse en ocasiones el ganadero en solitario a las grandes multinacionales.
Saludos.
Eran tiempos en los que Béjar aún tenía una pujante industria textil. Lo que allí se cocía trascendía la localidad, y por ello esta obra supera también lo local. Suerte y éxito con ese trabajo.
ResponderEliminarUn saludo.
Larga huelga que acabó justo al empezar la 1ª guerra mundial. Tiempos llenos de conflictos.
ResponderEliminarSuerte con el libro a Manuel.
buen fin de semana.
Un beso.
La historia se repite siempre: obreros que luchan, dueños que se enriquecen, materias primas más baratas, fábricas que cierran, gente que se queda sin trabajo...
ResponderEliminarBuen tema que demuestra que el estudio de la historia puede remecer los fundamentos de la sociedad. En mi modesta opinión, el conflicto partió cuando se definieron los conceptos de capital y trabajo, atribuyendo al primero el rol principal. En países católicos, como España y Chile, contribuyeron las "encíclicas sociales", que de sociales tienen poco, instalando una visión paternalista de la oligarquía sobre los trabajadores. Un diez para Pinceladas de Historia Bejarana. Desde Chile, Jorge Zúñiga Rodríguez.
ResponderEliminarNo se pueden quejar los habitantes de esta publicación de la buena información que existe sobre la historia de la ciudad.
ResponderEliminarBesos
Carmen Mi agradecimiento por sus visitas feliz domingo de Pascua Saludos
ResponderEliminarHola Carmen, gracias siempre por tus maravillosos comentarios en mi blog. Los libros de historia local son importantísimos para ayudar a entendernos a nosotros mismos. Lo que tenemos, lo que disfrutamos, lo que nos embellece la vida es gracias a las personas que lucharon por la dignidad del ser humano, por el trabajo y por la cultura.
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