El monasterio de Guadalupe y los duques de Béjar

 Autor: Jorge Zúñiga Rodríguez

         A 185 km SE de Béjar, por carretera y pasando por Plasencia, se encuentra este santuario llamado real por la protección que le dispensó Alfonso XI después de la batalla del Salado.

Monasterio de Guadalupe. Monasterioguadalupe.com

        En el capítulo La Casa de Béjar y el monasterio de Guadalupe, que el religioso e historiador Carlos G Villacampa incluye en Grandezas de Guadalupe, 1924, se lee que:  

       "Siempre fueron muy estrechas las relaciones entre este Monasterio y los Duques de Béjar[…]. Para convencerse de ello basta hojear el Libro de Bienhechores del monasterio, donde, comenzando por don Álvaro de Zúñiga, duque de Plasencia (después I duque de Béjar), todos los descendientes de aquella nobilísima Casa hicieron valiosísimas ofrendas a la Virgen de Guadalupe y a su Santuario."      

 

Casadellibro.com

       A los sucesivos titulares atribuye Villacampa los siguientes regalos, entre otros, para la imagen y el santuario:  

       "Un riquísimo frontal[…], dos lámparas de plata y una riquísima casulla de brocado[…], una corona de oro, de la cual se dice que era muy preciosa y estaba guarnecida de perlas y piedras preciosas[…], un riquísimo collar de oro guarnecido de perlas y piedras preciosas y unos tapices valuados en ciento cincuenta ducados […], un collar de oro esmaltado con rubíes y perlas, valuado en más de dos mil ducados[…], un claviórgano valuado en ochocientos ducados. "    

 

Detalle del Frontal de la Asunción, monasterio de Guadalupe. Guias-viajar.com

      Dice, además:  

        "El Excelentísimo Sr. D. Alonso Diego López de Zúñiga Sotomayor y Mendoza, duque de Béjar y de Mandas y de Villanueva, marqués, conde y vizconde, etcétera, vino a dar gracias a Nuestra Señora, a esta su Santa Casa de Guadalupe, domingo 17 de marzo de 1641 años, por un milagro que Nuestra Señora había hecho con Su Excelencia de darle vida y salud en una grave enfermedad que pocos días antes había tenido; habiéndose encomendado a Ella y hecho voto de venir a visitar este su santo templo…".  

 

Virgen negra de Guadalupe. Panibericana.com

        "Entre otros monumentos que dejó de su gran piedad y devoción, heredadas de sus excelentísimos progenitores, por primicias de sus deseos dio de limosna a esta Santa Casa dos mil reales, en cera, dinero y otras cosas, dejando asimismo provisiones para sus Estados, mandando a sus vasallos, so graves penas, sirvan y acudan a todo lo que esta Santa Casa hubiese menester de caza, pesca, corchos, curtidos, gredas y otras cosas."

 

Arqueta de los Esmaltes. Sala del Tesoro, Monasterio de Guadalupe. Superstock.com

 

           Al abrir, medio siglo después de su muerte, la fosa de Gutierre de Sotomayor y Zúñiga, II conde de Belalcázar y nieto de Álvaro de Zúñiga, I duque de Béjar, algunas reliquias suyas fueron enviadas al monasterio guadalupano por su pariente Francisco de Zúñiga, IV duque de Béjar, "por respeto de haber sido fraile en la dicha Casa de Nuestra Señora de Guadalupe" con el nombre de fray Juan de la Puebla.

 

Fray Juan de la Puebla. Turismopuebladealcocer.com

         Bajo un altar de la iglesia del monasterio de Guadalupe se encuentra una lápida que dice: "Hic jacet (sic) el corazón del Ex.mo Sr. Dn. Manuel López de Zúñiga y Sotomayor, duque de Béjar. Murió en Buda año de 1686". Se trata del X titular, el Buen Duque, cuyo cuerpo está enterrado en el cementerio de San Miguel de Béjar.

Ayuntamientodebelalcazar.blogspot.com

 

       En sus trabajos La participación del X Duque de Béjar Don Manuel de Zúñiga en el sitio de Buda (1686), 2013, y La creación de una memoria cristiana y guerrera. El caso del X duque de Béjar (1657-1686), 2015, el historiador Emiliano Zarza Sánchez presenta el siguiente episodio que encontró en el Archivo Histórico Nacional, Sección Nobleza:  

        "Sabemos que D. Juan Manuel, primogénito de D. Manuel, sufría ataques de «alferecía». En cierta ocasión, cuando el niño contaba un año, el duque encomendó a la Virgen de Guadalupe su curación, para lo cual le dejó con su imagen a solas rogándole que hiciera con él su voluntad."

       Antes de partir a la guerra, el duque Manuel de Zúñiga había hecho entrega de su collar de la Orden del Toisón de Oro a la Virgen de Guadalupe, que permaneció prendido a su manto hasta 1835, en que se perdió. Declarada la imagen Reina de la Hispanidad en 1992, la Hermandad de Caballeros de Guadalupe mandó confeccionar una copia "labrada en plata sobredorada por el importe de 600.000 pesetas", para reemplazarlo.  

 

Réplica 1992 del collar del duque de Béjar. Caballerosdeguadalupe.com

 

Otras lecturas:

Miranda Díaz, Bartolomé: Las reliquias que entregó el Duque de Béjar D. Francisco de Sotomayor y Zúñiga (sic) al Monasterio de Santa María de Guadalupe en 1544. 2007

S. Joseph, Francisco de: Historia universal de la primitiva y milagrosa imagen de Nuestra Señora de Guadalupe. 1743