9 de diciembre de 2022

Juan Rodríguez Bejarano en la conquista de Tenochtitlan junto a Hernán Cortés

  Autora: Carmen Cascón Matas

   Publicado: Béjar en Madrid, 4879 (17/IX/2021), p. 4, y 4880 (1/X/2021), p. 4.


      Allá en 2018, la Real Academia de la Historia puso en marcha un loable proyecto no exento de polémica: el Diccionario Biográfico Español electrónico[1]. Con contenido exclusivamente on line, el portal ofrece un buscador que permite al internauta indagar en las biografías de cientos de españoles de renombre a lo largo de la Historia, una delicia para el investigador. Sin embargo, y a pesar de su nunca cuestionable utilidad, omite ciertos nombres dados como relevantes a nivel local y la elección de algunos biógrafos es discutible. 

 Hernán Cortés en Tenochtitlan

       Por ejemplo, incluyen las biografías de varios duques de Béjar, del marqués de Valero, del escultor Mateo Hernández, del escritor anarquista José María Blázquez de Pedro, del marino Tomás Olleros Mansilla, del bufón y escritor Francés de Zúñiga,  del escritor Emilio Muñoz García, del conquistador Andrés Dorantes, de los políticos Andrés y José Sánchez-Ocaña, de los fabricantes textiles José y Jerónimo Rodríguez Yagüe, del coleccionista y viajero Valeriano Salas o  del organista y compositor José Lidón Blázquez. Pero de manera imperdonable omiten al filósofo Nicomedes Martín Mateos o al escritor y guionista Florentino Hernández Girbal, vaya usted a saber si porque no los consideran ilustres o porque no tenían biógrafos a mano.

            Al margen de lo expuesto, indagando con paciencia en el mencionado portal, me he topado con nombres de bejaranos ilustres, cuyo hallazgo ha sido de todo punto fortuito. Tal es el caso del desconocido Juan Rodríguez Bejarano

 



 

            Nacido en el siglo XV y muerto en el siglo XVI, sin datos más precisos, María Montserrat León Guerrero, autora de su escueta biografía, da por hecho su nacimiento en Béjar, de ahí el segundo apellido que tomó, quizá por herencia familiar, quizá por distinguirse de otros con un nombre y primer apellido demasiado comunes en la aventura que emprendería en sus años mozos. Porque, como otros de sus contemporáneos y paisanos suyos, véanse Andrés Dorantes de Carranza[2], Pedro Dorantes Arias[3] o Francisco Hernández de Herrera, se embarcó en la aventura americana. Puso rumbo desde Sanlúcar de Barrameda hacia Santiago de Cuba en fecha incierta y en 1518 se embarcó en la expedición de Hernán Cortés hacia el Yucatán, uno más de los 518 infantes que se apiñaban en las once naves que la componían.

      Juan Rodríguez Bejarano asistió a acontecimientos capitales para la Historia de España, además de destacarse por ser uno de los primeros europeos en contemplar la impresionante ciudad de Tenochtitlán. Sus zancadas recorrieron cientos de leguas entre llanuras, montañas y selvas. Asistiría al encuentro entre Cortés y el Moctezuma. Escucharía a doña Marina traducir el azteca al castellano y fundaría la ciudad de Veracruz. Y sufriría y haría sufrir, como tantos hombres curtidos y bregados en la guerra de aquellos tiempos, en la masacre de Cholula y lucharía en Otumba. Asistiría al choque entre dos civilizaciones, una engullida de manera irremediable por la otra, más avanzada en las artes de la guerra. Su intervención más sobresaliente, un hecho que después presentó ante Carlos V como prueba de bravura y lealtad para obtener un escudo de armas, ocurrió en la toma de Tenochtitlán. Así se narra en 1539:

 

Conquista de Tenochtitlan

 

            «Por fuerza de armas atacastes en una casa fuerte de un vezino della e sacastes al patio della a una señora muy prinçipal que viendos la sacar El capitan general os mando que la llevases delante para se ynformar della a la voluntad que tenyan en las cosas de la guerra los señores y naturales de la dicha ciudad, la qual le llevaste e que avia aviendos informado della mando dar convate a la dicha señora y que ansi se gano por aviso que la dicha señora avia dado[4]».

            Una crónica posterior añade que, al tiempo que Juan Rodríguez Bejarano sacaba de la casa a la gran señora indígena y la llevaba ante Cortés, el capitán y conquistador no dejaba de advertir que los castellanos trataban bien a las mujeres de sus enemigos bajo la atenta mirada de doña Marina[5]. Sea cierta o no esta anécdota, el caso es que no fue ésta la única acción del bejarano, aunque sí la más destacada, tanto que en 1539 Carlos V le concede una encomienda de indios en Huaquilpa y un escudo de armas propio, a él y a toda su descendencia:

 

Otumba. Augusto Ferrer Dalmau

 

            «En el medio del esta una casa fuerte de oro, en campo colorado y al pie della unas aguas azules y blancas y por orla ocho rosas de oro en campo azul y por divisa un yelmo cerrado que ençima deste un león en salto». 

Archivo de Indias. Escudo armas: Juan Rodríguez Bejarano: Nueva España. PATRONATO,169,N.1,A.1539,R.3, f. 1v.

 

            Las concesiones de este tipo de distinciones tenía que partir del propio interesado y durante estas décadas de conquista fueron moneda corriente para distinguir a los bravos soldados que ampliaban las fronteras del Imperio. El diseño podía ser sugerido por el demandante y el Consejo de Indias aplicaba las reformas que estimaba conveniente. Asimismo sabemos que casó con Beatriz Rodríguez y que tuvieron al menos a dos vástagos, Juan y Alonso, herederos, no sin peleas con su tío Diego Rodríguez Bejarano, de la encomienda de indios, del escudo, del apellido y de otros bienes en formas de pesos de oro[6]. 



[1] http://dbe.rah.es/biografias/44481/juan-rodriguez-bejarano

[2] Gonzalo SANTONJA GÓMEZ-AGERO. La Epopeya Americana de Andrés Dorantes. Discurso de entrada al Centro de Estudios Bejaranos. Septiembre de 1993.

[3] Óscar RIVADENEYRA PRIETO. «Pedro Dorantes Arias en el Río de la Plata». Y del mismo autor «El bejarano que regresó de América cubierto de oro», ambos trabajos publicados en Béjar en Madrid.

[4] Archivo General de Indias. ES. 41091. AGI//PATRONATO, 169, N.1, A.1539, R.3. Real Provisión a Juan Rodríguez Bejarano, vecino de México, concediéndole un escudo de armas por sus servicios en la conquista de Nueva España. Madrid, 18 de octubre de 1539.

[5] Antonio de Herrera y Tordesillas. Historia general de los hechos de los castellanos en las Islas y Tierra Firme del mar Océano que llaman Indias Occidentales, volúmenes 2-3 (1601-1615), pp. 44 y 45.

[6] Archivo General de Indias. ES.41091.AGI/25//MEXICO,1092,L.13,F.65V-66VReal cédula a Luis de Velasco [Castilla], virrey de Nueva España, para que señale a Juan Rodríguez Bejarano, hijo de Juan Rodríguez Bejarano, conquistador de Nueva España, 150 pesos cada año, además de los 80 que ya tiene concedidos, situados en los tributos de los indios puestos en la Corona para entretenimientos de hijos y nietos de conquistadores.

 

9 comentarios:

  1. Una delicia para el investigador: pero como bien apuntas, se pueden quedar cabos sueltos , como esta escueta biografía de este insigne bejarano., uno más de los que partieron para la Nueva España.Cuanta gloria y cómo todos los imperios llega un día que solo se sabe su Historia gracias a la labor de investigación los archivos son esa memoria.
    Desearte unas tranquilas fiestas estimada Carmen

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  2. Ángel Mª Ridruejo Cabezasviernes, 09 diciembre, 2022

    Ojalá algún día sepamos reconstruir toda la biografía de este bejarano, protagonista de unos hechos históricos que la corrección política ve con malos ojos abordar. Enhorabuena, Carmen, por saber reivindicarlo con objetividad.

    Aunque creo que tu opinión sobre el Diccionario Biográfico es, ejem, demasiado diplomática...

    Un saludo muy cordial, Carmen.

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    1. Hay más bejaranos en la conquista del Nuevo Mundo abordaremos más adelante.
      Gracias por los ánimos.
      Un abrazo

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  3. Ese error es solucionable, si se actualizan los datos y se incorporan los que quedaron atrás.
    Besos.

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  4. Siempre se pueden reformar todas las cosas mal hechas con mas o menos intención como ocurre con este bejarano y quizás muchas otras personas.

    Saludos.

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  5. Hola Carmen:
    Las labores de investigación, deja muchas veces, ganas de más.
    Hechos ocurridos hace 500 años más o menos, que marcaron no solo a España, también al resto del mundo

    Besos Carmen

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  6. Interesante entrada Carmen, espero que algún día puedan encontra más datos sobre Juan Rodríguez Bejarano.

    Un abrazo.

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  7. Buen trabajo ese Diccionario electrónico. Para no perderlo de vista por lo mucho que puede ayudarnos.
    Una vez más, podemos apreciar que no hay nada nuevo bajo el sol.
    La mirada de la dama indígena, la búsqueda de notoriedad, las reyertas por la herencia...

    Y sobre todo, lo mucho que vas, vamos, a disfrutar de este nuevo portal. Como bien dices, una delicia.
    Vaya para vosotros mi deseo de unas Felices Navidades y de que los Reyes Magos sean generosos con el personaje principal de las Fiestas. Un abrazo.

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"No existen más que dos reglas para escribir: tener algo que decir y decirlo." Óscar Wilde.