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20 de mayo de 2023

La fundación del convento de la Piedad, las donaciones de la duquesa fundadora y la procesión del Corpus (1ª parte)

Autora: Carmen Cascón Matas 

Publicado: Béjar en Madrid, nº 4.883 (19/XI/2021), p. 4.

 

            Calles plagadas de gentes variopintas, solemnidad, bullicio y olores diversos, a incienso, a fritanga, a sudor de bestias y hombres. El cortejo se alarga calle Mayor arriba sin dar visos de fenecer entre inciensos y músicas. Los muchachos se arremolinan para otear mejor, abriéndose paso a empellones hasta las primeras filas y recibiendo a cambio alguna que otra colleja. El Mondo, que así apodan a un zagal por su cabeza plagada de costras, ha logrado un buen puesto para ver y birlar bolsas en ese Corpus por el que todos andan medio embobados entre fastos y oropeles. 

 

 Edificio construido a finales del siglo XIX donde un día estuvo la capilla del desamortizado convento de la Piedad


         Y es que este de 1603 es harto diferente porque, a cuenta del fallecimiento de la duquesa Brianda Sarmiento de la Cerda, la procesión ha ganado en más lujos si cabe. El capellán de las Monjas de Abajo estrena un terno nuevo encarnado y otras cosas que hacen quedarse con la boca abierta a los gañanes que de Villa y Tierra se congregan en el recorrido. “Si mi mano fuese más larga que espada de vizcaíno y la presencia de las milicias no fuera tanta, pardiez que me volvía rico para largarme a Indias”, se dijo El Mondo mientras miraba con ojos ávidos tanto joyel y tanta orfebrería de paseo por la calle.

7 de mayo de 2023

Vavá o la sombra del éxito

 Autor: Ignacio Coll Tellechea

Publicado: El Día de Salamanca, 28/09/2014.

La tarde del 23 de octubre de 1966 las fábricas de Béjar se vaciaron deprisa. Con las lanzaderas aún calientes después de recorrer inagotables los telares, los obreros del turno de tarde salieron con prisa para escuchar en grupo, a través de la radio, el encuentro internacional que enfrentaba a la Selección Española con la de Irlanda en Dublín, en partido clasificatorio para el Campeonato de Europa de Naciones. El seleccionador, Domingo Balmanya, alineaba de inicio a Sanchís, Violeta y Santamaría. Y como punta jugaba el delantero del Elche Luciano Sánchez García, al que desde que debutase cuatro años antes en el Béjar Industrial todos llamaban Vavá.


Empataron sin goles. Extraño bautismo para un delantero centro con los genes del 9 cosidos en las botas de jugar al fútbol. Para el Pichichi de la temporada anterior en la Primera División con 19 dianas en 30 partidos, por delante de un espigado ariete del Atlético de Madrid que se proclamó campeón de Liga y que se llamaba Luis Aragonés.

Cromo de Vavá (Imagen de Todocoleccion.net)

28 de abril de 2023

Descubrimiento del busto a San Juan Bosco

Autor: Francisco Tejeda Blázquez

En 1990 la Asociación de Antiguos Alumnos Salesianos de Béjar conmemoraba las bodas de Diamante de su fundación (1915-1990). En sus principios su primer presidente fue Segundo Estévez y el primer consiliario Buenaventura Roca. Para celebrar esta efeméride, durante el curso 1990 se organizaron diversos actos conmemorativos. Como acto principal se propuso erigir un monumento a don Bosco en la plazuela de su mismo nombre, frente al antiguo colegio Salesiano, hoy residencia de mayores «Mamá Margarita». Y sobre este gran objetivo nos centramos, la inauguración del Busto a don Bosco.


 

En este curso se crea una comisión ejecutiva presidida por José Ángel Hernández, con el único fin de gestionar y conseguir fondos. Después de un arduo trabajo, contactos y gestiones en la tarde del sábado 30 de junio de 1990, una vez finalizado el acto religioso que fue presidido por el inspector salesiano Aureliano Laguna en un templo salesiano lleno de gente, se inauguraba el busto a San Juan Bosco. 

15 de abril de 2023

Sobre cómo era la primavera en torno al río Cuerpo de Hombre y los alrededores de Béjar en otros tiempos

 Autor: Agustín B. García Gómez

         En estos días en los que el valle del río Jerte, hermano de los valles del Cuerpo de Hombre y del Ambroz, valles trillizos nacidos a los pies de la Sierra de Béjar, visten las mejores galas florales de sus cerezos que a tantos visitantes atrae, uno no puede por menos que recordar las palabras del viajero Antonio Ponz que en 1775 en su recorrido por España y al llegar al valle del Cuerpo de Hombre escribió aquello de

 


        “La Villa de Béjar, está puesta sobre una alta loma entre las sierras, que llaman también de Béjar, incomparablemente más elevadas, y son en las que tiene fin, por el lado opuesto, el valle de Plasencia, unidas al puerto de Tornavacas. La subida a la villa es rápida, y penosa: la mayor parte está cercada de un rio, que llaman Cuerpo de Hombre, y nace en un paraje de la serranía, llamado Navamuño”.

8 de abril de 2023

La Virgen de los Dolores, una talla de Francisco González Macías recuperada en 2017 por la Vera Cruz de Béjar

  Autora: Carmen Cascón Matas

 

          En noviembre de 1966 el escultor bejarano Francisco González Macías[1] estaba concluyendo la exposición de algunas de sus obras en la Sala Grifé Escoda de Madrid. Durante los años precedentes había reducido su actividad artística hasta que comienza de nuevo a rodar en ese año, pues entrega un Cristo Crucificado a la Casa de Caridad costeada por Ángel Rodríguez Olleros. Esta noticia, y la restauración de su Cristo Yacente del Sepulcro y el Amarrado a la Columna (nos imaginamos que se trata del depositado en el Museo «Mateo Hernández» realizado en escayola y el de la ermita del Humilladero de Candelario respectivamente), demuestran que el artista pasó un tiempo en Béjar.


            No eran años boyantes para González Macías. Tenemos que tener en cuenta que había tenido taller abierto, primero en Salamanca y después en Madrid, y de ahí había regresado a Béjar por un descenso palpable en el número de encargos. No se había decantado por la temática religiosa de manera exclusiva durante esos años, aunque así podamos deducirlo de las obras hasta ahora nombradas, sino que también había tocado el retrato para ornato público, las alegorías y los animales. Los materiales variaban siendo la piedra y la madera los más frecuentes en las obras de nuestro escultor, dependiendo de la finalidad última de sus esculturas. A partir de la guerra civil se había centrado en la imaginería religiosa en madera, dado que eran las cofradías y los donantes privados sus principales clientes. 

1 de abril de 2023

Bancos dentro, bancos fuera: conflictos entre el poder civil y religioso en las procesiones de Semana Santa de 1675

Autora: Carmen Cascón Matas

Publicado: Béjar en Madrid, nº 4.910 (20/I/2023), p. 4.

        Las celebraciones religiosas de la Edad Moderna se convertían a veces en escenario de escándalo y enfrentamiento entre los estamentos civil y eclesiástico, pues no en vano se erigían en espectáculo público y mostraban la preeminencia de los poderosos sobre las clases populares y la estricta jerarquización social[1]. Las numerosas fiestas que salpicaban el calendario litúrgico se organizaban de manera escrupulosa, siguiendo un orden que era imposible de fracturar. Aun con todo no faltaban ocasiones en las que, o bien los clérigos, o bien los ediles del consistorio, intentaban enseñorearse en ellas en un tira y afloja sin fin[2]. Los conflictos eran tan habituales y provocaban tal falta de decoro en acontecimientos que debían per se realizarse con toda solemnidad que se intentaron regular para atajar los insultos, empujones y altercados que unos y otros perpetraban en mitad de misas y procesiones. 

            El motivo fundamental pivotaba en torno a la idea de que los miembros del Cabildo y los eclesiásticos de la villa debían mantener el privilegio de encabezar las procesiones y las ceremonias religiosas, dejando de lado a los representantes civiles. La costumbre inmemorial dictaba que estos últimos se colocaran en las naves centrales de las iglesias, con sus bancos privativos en un lugar preferente en las fiestas así dispuestas por la Regla del Cabildo, privilegio desconocido -el de oír misa cómodamente sentados- para el resto de la población, que había de postrarse de rodillas durante las ceremonias. Tal disposición había sido aprobada por escrito en una ejecutoria de 1601 por los continuos dimes y diretes.

27 de marzo de 2023

De la estancia de Nebrija en Béjar en abril de 1488

El año pasado se festejó con gran aceptación en los ámbitos académicos la muerte de Antonio de Nebrija (m. 1522), insigne gramático, humanista y profesor al que se conoce a nivel general por haber emprendido la redacción de la primera Gramática castellana. Sin embargo, no fue su única ni su más famosa obra entre sus contemporáneos. También abordó la compilación de un Diccionario latino-español y un Vocabulario español-latino


Habiendo nacido en Lebrija, Sevilla, en 1444, estudió en las universidades de Salamanca, Córdoba (Teología) y Bolonia, y después impartió clases como catedrático en la propia universidad de Salamanca de Gramática y Retórica.  Su prestigio era inmenso para cuando se casó con Isabel Solís de Maldonado, pero la Iglesia le retiró su asignación económica, cada vez más escasa además a medida que la pareja iba teniendo descendencia. 

25 de marzo de 2023

Dos ejemplos de la azulejería de Juan Ruiz de Luna en Béjar (1863-1945) (2ª Parte)

Autora: Carmen Cascón Matas

Publicado: Béjar en Madrid, 4.903 (14/IX/2022), p. 11.


          Si en octubre de 2021 me topé por vez primera con una obra del artista cerámico de Talavera de la Reina Juan Ruiz de Luna (recordemos, una fuente en la residencia teatina del Castañar) en Béjar, en marzo de 2022 volvía a cruzarse en mi camino de la mano de Maika Martín Peña y el bello edificio de Mateo Iglesias en la calle Mayor, cuya característica fachada ha sido restaurada hace unos años. 

Firma de Ruiz de Luna en uno de los azulejos que decoran la fachada de Sánchez Ocaña

 

            La construcción, debida a la mano del arquitecto Benito Guitart Trulls[1], luce en su fachada unos bellos paneles de azulejos con motivos platerescos azules sobre blancos. Inspirados en los relieves de los edificios salmantinos y no portugueses, como bien se ha barajado en los últimos tiempos, son charros en cuanto a la recuperación de elementos decorativos renacentistas y talaveranos por el taller de procedencia. La idea primigenia de colocación podemos explicarla, bien a la voluntad de Guitart, ejemplo de artista total que encarnaban los modernistas con el ejemplo de arquitectos como Domenech i Montaner o Puig i Cadafalch –eran capaces de diseñar mobiliario, azulejería, ferretería y otros elementos constructivos y decorativos, o bien de planear todos estos elementos en su conjunto-, bien al mecenas del edificio, el comerciante Mateo Iglesias, quien no dudaría en encargar al más afamado ceramista de Talavera la decoración de su casa bajo el proyecto del arquitecto barcelonés. Si la fuente del Castañar fue un regalo realizado a la residencia teatina por un industrial, los paneles cerámicos del edificio de la calle Mayor de Sánchez Ocaña procederían de la adquisición directa de su promotor o por la relación que existía entre los intelectuales y artistas del momento, véase un Guitart que entonces estaba trabajando en la Ciudad Lineal de Madrid[2] con Ruiz de Luna

18 de marzo de 2023

Dos ejemplos de la azulejería de Juan Ruiz de Luna en Béjar (1863-1945) (1ª Parte)

Autora: Carmen Cascón Matas

Publicado: Béjar en Madrid nº 4.902 (02/IX/2022).

        Es posible que me haya topado en algún momento de mi existencia con Juan Ruiz de Luna y, por supuesto, no en persona porque este artista azulejero nació en un pueblecito de Toledo en 1863, Noez, y murió en Talavera de la Reina en 1945. Sin embargo, desde octubre del año pasado hasta este mes de marzo en que escribo estas líneas se ha cruzado en mi camino por azares del destino dos veces y ambas en Béjar. 

 Fuente de Ruiz de luna en la residencia teatina del Castañar de Béjar

11 de marzo de 2023

Fábrica y jardín: el vínculo de Juan Téllez de Meneses en Béjar

Autor: Óscar Rivadeneyra Prieto  

Avanzado el siglo XVIII el furor por la fundación de nuevos mayorazgos ya había pasado, y las rentas que permitían vivir y acrecentar fortunas a los hombres más acaudalados empezaban a basarse en la intensidad de las actividades empresariales y de los nuevos negocios. En la tercera década de aquella centuria Béjar comenzaba a sentir los resultados de la promoción industrial ducal, que había tenido en la llegada de los artesanos flamencos a la villa en 1692 su hito más simbólico. Quizá la figura más ejemplar de este renovado modelo de fabricante se personifique en Juan Téllez de Meneses.

Conjunto de propiedades de Juan Téllez bajo la iglesia de Santa María y con el obrador de Arias a la derecha de la imagen

 

Como en otras ocasiones, empecemos por el final.

La muerte de don Juan, afectado por la enfermedad de la gota, tuvo lugar el 9 de septiembre de 1739. Los autos judiciales que se dieron tras el hecho nos sirven para tener una visión bastante precisa del patrimonio que había acaparado a lo largo de su vida, ejemplo magnífico y paradigmático del estilo de vida de un fabricante textil dieciochesco en Béjar. La ocupación de Téllez durante su existencia se dividió entre el alto servicio al duque Juan Manuel II y la propia actividad textil

7 de marzo de 2023

La Asociación Femenina de Educación Ciudadana de Béjar (2ª Parte y final)

Autora: Teresa López Hernández

          Publicado: Revista de Ferias y Fiestas de Béjar, 2021, pp. 16-19.

Las actividades de la Asociación Femenina de Educación Ciudadana de Béjar se centraron en tres objetivos:

-          Estudio para dirigir, formar y orientar

-          Propaganda

-          Obra Social

Para conseguir el primer objetivo se creará un Círculo de Estudios desde el que se procurará capacitar a las mujeres para su intervención en la vida pública.[1] Teniendo en consideración el papel de la mujer en la sociedad y, aunque las mujeres no estaban preparadas para ejercer funciones de gobierno como diría en una conferencia Carmen Muñoz Elena, debían utilizar esos derechos para trabajar en bien de la patria. Y les recomienda que cuando voten tengan en cuenta la trayectoria del candidato, poniendo de ejemplo a la mujer inglesa que con su voto derrotó a los laboristas.[2]

Foto de aquí

 

Esta labor se llevaría a cabo mediante:

- La divulgación de los programas electorales de partidos como Acción Popular a cuya asamblea, celebrada en Madrid, acudieron. Difundiendo después las bases ideológicas de la coalición de partidos católicos y de derechas cuando se unieron en la Confederación Española de Derechas Autónomas (CEDA).[3]

- Informando, ya cerca de la fecha de las elecciones, de cómo ejercer el voto y solventando todas las dudas que pudieran surgir. Por lo que se rogaba a todas las asociadas y todas las mujeres que simpatizaran con la candidatura agraria de derechas que pasaran por la sede de la asociación, para enterarse de todo cuanto pudiera afectarles en relación con las elecciones próximas.[4]

- Dando publicidad a todos estos actos mediante revistas propias que servían de apoyo y extendían su repercusión. En aquellos casos en que no se pudieron editar publicaciones especificas se utilizaron como soporte los periódicos que compartían su misma ideología.

4 de marzo de 2023

La Asociación Femenina de Educación Ciudadana de Béjar (1ª Parte)

Autora: Teresa López Hernández

Publicado: Revista de Ferias y Fiestas de Béjar, 2021, pp. 16-19.

La instauración de la II República en España el 14 de abril de 1931 supuso la redacción de una nueva Constitución en la que se plasmarían los derechos y deberes de los ciudadanos. Uno de esos derechos sería el sufragio universal, que comprendía el ejercicio del voto por parte de las mujeres.

Este reconocimiento suscitó un gran debate que definió la postura de los distintos partidos políticos que conformaban el Parlamento. La mayoría de ellos se posicionó en contra, argumentando que las mujeres no estaban preparadas para ejercerlo y que su mentalidad religiosa y conservadora significaría la pérdida de votos para las izquierdas y sería el fin de la República.

 


Su aprobación se pudo llevar a cabo gracias al apoyo del Partido Socialista y los partidos de derechas, si bien por causas distintas. Mientras los socialistas lo veían como una consecuencia lógica del reconocimiento de derechos y libertades, las derechas, que se habían opuesto en un principio, pronto se dieron cuenta de las ventajas que para ellos supondría atraer el voto femenino en las próximas elecciones.[1]

28 de febrero de 2023

El Ecce Homo de la iglesia desaparecida de San Andrés de Béjar y otros apuntes

 Autora: Carmen Cascón Matas

       Hace unos días tuvimos noticia del interés por restaurar un pequeño cuadro de solo 30 centímetros de lado que se guarda celosamente en la iglesia parroquial de Santa María la Mayor de Béjar[1]. Quizá su calidad artística no sea notable, pero sí es interesante la historia que lo acompaña. Al respecto de su valor artístico, es posible que si se restaura podría aparecer la firma de su autor o, con la eliminación de repintes, encontrarnos con alguna sorpresa agradable en cuanto a su calidad originaria. 

Ecce Homo de la desaparecida iglesia de San Andrés

            Empecemos por analizarlo.  Representa un Ecce Homo de la mitad del torso hacia arriba, con la vista baja hacia su derecha y con una soga atada al cuello. Un halo circunda su cabeza de cabellos largos, ligeramente ondulados y cobrizos. Su figura destaca sobre un fondo oscuro, amarronado. Es posible que a su izquierda aparezca representada una columna. El estado de conservación es deficiente, con repintes aplicados en algún momento, faltas de materia pictórica en algunas zonas localizadas por pérdida y oscurecimiento general de la pintura por oxidación de los barnices y la suciedad adherida

 Ecce Homo de Luis de Morales (hacia 1565). Fundación Banco Santander

23x15 cm.

El modelo general responde al muy difundido por el pintor extremeño Luis de Morales y que tanto predicamento tuvo en la segunda mitad del siglo XVI con variantes (con o sin columna, con o sin soga al cuello o en las muñecas, presencia de capa roja o azul, caña y corona de espinas, del torso para arriba o de figura entera, mirando hacia la derecha o hacia la izquierda, o con los ojos hacia el cielo)[2]. Es arriesgado decir que este Ecce Homo de Béjar saliera de su mano porque la calidad es muy inferior a la de Morales y así podríamos estar ante un lienzo de seguidor o de taller que siga el modelo del maestro. La autoría nos es, de momento, desconocida. Gómez-Moreno sorprende al declarar sobre esta pintura «su factura y color, así como la disposición de la figura, recuerdan las obras de Morales, pero nada conozco suyo tan correcto, clásico y bello»[3]

 Ecce Homo. Taller de Luis de Morales. Museo del Prado

40x28cm.

            La historia del cuadro es interesante para Béjar porque procede de la parroquia desaparecida de San Andrés, un edificio que se situaba a extramuros de la villa, al final de Barrio Neila[4], cerca de la Puerta de la Traición, también desaparecida. Y tenemos constancia de ello porque una persona anónima escribió en el reverso a lápiz su procedencia, su situación en el retablo de la mencionada iglesia y que fue transportada a la de Santa María en 1703 por el clérigo Antonio Ortiz de Zúñiga. De este apunte podemos decir que este retablo se componía de cuadros en todo o en parte y solo se salvó este pequeño fragmento. 


Ecce Homo de Luis de Morales. Museo de Badajoz.

La iglesia de San Andrés debió de adquirir cierta importancia a lo largo de la Edad Media: primero porque tenía un hospital propio, que luego fue englobado en el de San Gil en 1573, y segundo porque ser párroco de San Andrés aparejaba el cargo de arcipreste de Béjar. Con la dependencia de esta parroquia a la de Santa María la Mayor con el proceso de reducción parroquial de 1568, fue perdiendo relevancia y acabaría arruinada hacia 1703, el año en que se traslada el cuadro, quedando de ella el cargo testimonial de arcipreste y cura de San Andrés, la cruz parroquial que acabó en la iglesia de Santa María (y que ahora se saca como principal de la parroquia en la procesión del Corpus Christi) y este lienzo. Que desapareció antes de 1727 explica que en ese año Ventura Lirios no la representase en su Vista de Béjar[5].

La devoción a San Andrés debía de haber calado hondo entre los bejaranos porque era procesionado junto con otras tallas de santos en la procesión del Corpus Christi[6]. Además se celebraba por su festividad una feria que desapareció en 1642 al quedar englobada en la general de septiembre y trasladarse a Aldeanueva del Camino. En esta feria de San Andrés se vendía y compraban cerdos y reses en la zona de la Solana[7]. Otro apunte de su relevancia en Béjar es que una de las torres del palacio ducal llamaba el nombre de Cubo de San Andrés

 Ecce Homo de Luis de Morales. Museo del Prado

73x50cm.

Detengámonos también en la cruz procesional de San Andrés por figurar en su reverso la figura de este santo. Siguiendo el excelente trabajo sobre platería realizado por Roberto Domínguez Blanca[8], se puede afirmar que es una gran obra de orfebrería en plata de principios del siglo XVII. Al ser imposible por fechas que proceda de esta desaparecida parroquia , ya reducida a Santa María desde 1568 como hemos comentado, quizá su precedencia sobre la de Santa María derive de seguir el arciprestazgo de Béjar vinculado a este desaparecido templo.



[1] Ya estaba allí en 1939 según don Juan Muñoz García. «Datos para nuestra historia. Sobre el templo y sobre la parroquia de Santa María». Béjar en Madrid, 1939, p. 3.

[2] Sobre este lienzo consultar Roberto DOMÍNGUEZ BLANCA y Mª Carmen CASCÓN MATAS. «El arte en Béjar desde el Medievo hasta 1900», en Historia de Béjar volumen II, Centro de Estudios Bejaranos y Ayuntamiento de Béjar, 2012, pp. 481-547. Aquí 488 y 489.

[3] Manuel GÓMEZ-MORENO. Catálogo monumental de la provincia de Salamanca. Caja Duero, Salamanca, 2003, p. 409. Recogido en el anterior.

[4] Robustiano GARCÍA NIETO. «Contribución al estudio de la Historia de Béjar». La Victoria, Béjar 1919, p. 124.

[5] Ceferino GARCÍA MARTÍNEZ. Un paseo por el Béjar del siglo XVIII. Madrid, 1987, 95 págs.

[6] Alejandro LÓPEZ ÁLVAREZ. Ideología, control social y conflicto en el Antiguo Régimen: El derecho de patronato de la Casa ducal sobre la procesión del Corpus Christi de Béjar. Centro de Estudios Bejaranos y Ayuntamiento de Béjar, 1994, 201 págs.

[7] OSUNA,C.233,D.191-192. Petición del concejo de la villa de Béjar (Salamanca) al duque para que autorice emplear los 8 maravedíes por cabeza que se cobran en la feria de San Andrés en la construcción de unos arcos para el suministro de agua a la villa a través del valle de Corredera.

[8] Roberto DOMÍNGUEZ BLANCA. La platería del Renacimiento en Béjar. Centro de Estudios Bejaranos y Ayuntamiento de Béjar, 2009, 340 págs.

 

25 de febrero de 2023

Zarzuelas en Béjar a comienzos del siglo XX (2ª Parte y final)

Autora: Josefa Montero García

Publicado: Revista de Ferias y Fiestas de Béjar, 2022, pp. 54-56.


Escenarios y entidades culturales

El Colegio Salesiano celebraba habitualmente veladas donde participaban sus jóvenes alumnos. En febrero de 1904 hubo una función de teatro, donde los niños representaron distintas “obritas”, como la zarzuela burlesca titulada La muerte del Carnaval, de José Pujol, profesor del mismo colegio. El redactor de La Victoria subrayaba el éxito de los niños y alababa la labor social y cultural de los salesianos en Béjar[1]. El colegio tenía, además, su propia banda de música, que actuó algunas veces en el Círculo Católico, donde interpretó una sinfonía en abril de 1905 como comienzo de una velada, donde hubo discursos y dos zarzuelas en un acto (La escuela de la aldea y El deshollinador), además de la comedia El mejor premio.

                       Foto extraída de Archivo fotográfico y documental de Béjar

        En las funciones del Círculo Católico, alternaban las zarzuelas con obras instrumentales, como la tanda de valses Los hidrópatas, con que comenzaba el programa de la velada literario-musical, que se anunciaba para la noche del 15 de abril de 1906[2]. El evento continuaba con una conferencia de Salvador Cuesta Martín, vicerrector y catedrático de la Universidad de Salamanca, a la que seguiría un arreglo para violín y piano de La sonámbula de Bellini, un pasodoble de Chueca adaptado para sexteto y piano y, finalmente, la zarzuela anteriormente mencionada Música clásica, del conocido Ruperto Chapí, que fue arreglada para la ocasión. Por fallecimiento de un socio, la velada se aplazó para el día siguiente y los intérpretes fueron muy aplaudidos[3].

22 de febrero de 2023

Actualizando al obispo Gonzalo de Estúñiga, el que decía misa en la iglesia de Santa María "armado de cota y malla"

        Hijo al parecer mimado de Diego López de Estúñiga, I señor de Béjar -habría sido promovido al episcopado por gestión directa de su padre ante el papa Luna en Barcelona-, el recuerdo del obispo Gonzalo de Estúñiga se mantiene vigente (Pinceladas de Historia Bejarana 25/05/2019)

 

El obispo Gonzalo de Estúñiga a caballo y con estandarte en un folleto devocional de fines del siglo XIX. http://botilleriajaen.blogspot.com/2015/11/don-gonzalo-de-zuniga-el-obispo-del.html

 

          La última puesta al día tuvo lugar en mayo de 2020, cuando en plena pandemia se reunieron el alcalde y los concejales del ayuntamiento de Jaén para tratar el cambio de nombre del último tramo de la calle Gonzalo de Estúñiga, que conduce al colosal Museo Íbero, por el de Pilar Palazón, notable promotora del patrimonio histórico jienense fallecida un mes antes.

 

18 de febrero de 2023

Zarzuelas en Béjar a comienzos del siglo XX (1ª Parte)

Autora: Josefa Montero García

Publicado: Revista de Ferias y Fiestas 2022, pp. 54-56.

Introducción

La prensa bejarana de hace poco más de un siglo nos muestra una vida cultural bastante activa, con numerosos espectáculos y veladas, que solían incluir alguna zarzuela. Queremos ocuparnos aquí de alguna de estas actuaciones, donde participaban bejaranos de distintas edades, que acudían a escenarios como el Teatro Cervantes, el Salón Variedades, el Colegio Salesiano o el salón del Centro Social. Nos ocuparemos tanto de compañías y actores profesionales, como de la actividad de los numerosos aficionados, que dedicaron su tiempo libre a la distracción de sus conciudadanos.

Teatro Cervantes de Béjar. Foto de aquí

 

Para realizar este pequeño recorrido por las piezas teatrales que en este contexto se representaban, especialmente las zarzuelas, hemos recurrido a las principales cabeceras bejaranas, que incluyen noticias, críticas y detalles de los espectáculos, permitiéndonos reconstruir en parte aquel ambiente y fijarnos en las personas que lo hicieron posible. La programación de estos espectáculos estaba en sintonía con lo que ocurría en otras poblaciones españolas, aunque obviaremos la comparación por no alargar estas líneas.

11 de febrero de 2023

Yo viví el Club Juvenil Bosco de Béjar. Una breve historia (6ª Parte y final)

Murga La Bejarana

Las fiestas y ferias de Béjar pasaban sin pena ni gloria. Los actos programados eran flojos, no tenían el interés que deberían tener y las actividades para los jóvenes carecían de interés. Había que conseguir que la gente participara de la alegría de las fiestas en las calles, pasar de actos pasivos a actos activos, que la ciudad entera viviera y disfrutara de sus fiestas y ferias.

Animados por José Marshall Carrera (presidente del Club Polideportivo Bejarano), a principios del mes de agosto de 1978 un grupo de jóvenes del Club Juvenil Bosco empeñados en celebrar las fiestas con alegría callejera, empiezan a moverse y a madurar la idea con el lema “¡A la calle como sea!”, y después de algunas gestiones y contactos con amigos y conocidos, la iniciativa se consolidaba.

4 de febrero de 2023

Yo viví el Club Juvenil Bosco de Béjar. Una breve historia (5ª Parte)

Autor: Francisco Tejeda Blázquez

Centro-bar y salón

El centro-bar y el salón eran los locales donde más vida social se hacía. En 1971 el Club había estrenado y disfrutado de unos sencillos salones, pero no fue hasta octubre de 1973 cuando se inauguran los nuevos locales, siendo presidente de los Antiguos Alumnos Salesianos Jorge Martínez Herrero y del Club Juvenil José Ángel Hernández, consiliarios, Julio J. Montero y Francisco Gutiérrez (en octubre de este mismo año se inauguraba el Cine Béjar con la proyección de la película ¡Tora, tora, tora!). 


 

En 1976 se reforma el salón con nueva decoración en las paredes, cubriéndolas de moqueta y madera, se adquiere nuevo mobiliario como tresillos y demás, se instala una artística colmena de luces en el techo… Durante los años siguientes se siguieron haciendo reformas y cambios. En estos salones era donde más horas pasábamos, donde nos conocimos, donde hicimos los mejores amigos. Aquí reinaba la amistad, la solidaridad, el buen rollo, y ahí quedaron los mejores recuerdos de nuestra juventud, amistades que hoy en día perduran, donde muchos conocimos a nuestras parejas… un verdadero Centro Juvenil, donde nos sentíamos jóvenes y útiles, teníamos los juegos de salón, jugábamos a las cartas, damas, ajedrez, ping-pong, futbolín, charlábamos, leíamos, preparábamos las futuras actividades como excursiones y convivencias, disfrutábamos de los bailes discotequeros, los cotillones de Nochevieja llenos de sorpresas, o los musicales especiales, con los que nos amenizaban los encargados del salón, Pedro Sánchez o Luis Bruna, los concursos y bailes de disfraces, concursos de sombreros, los bailes de salón, campeonatos de ajedrez, damas, cartas, futbolín, concursos discográficos, celebrábamos las fiestas de San Juan Bosco, las fiestas de la Unión, El Un Dos Tres, Responda Otra Vez.